El Ford Mustang GT de 1968 que el actor Steve McQueen condujo con maestría en la película Bullitt fue vendido al mejor postor en Kissimmee (Florida) por 3,4 millones de dólares, informó la firma de subastas Mecum.
Se trata de la suma más elevada que se ha pagado hasta ahora por un Ford Mustang en una subasta, según medios especializados en automóviles antiguos y de colección.
El precio pagado originalmente por este automóvil -de color verde oscuro, nunca restaurado y usado en la que se considera la primera escena de persecución automovilística filmada con las cámaras colocadas de manera que el espectador siente que está dentro del vehículo- fue de 3.500 dólares, señala el portal motor1.com.
En la escena cargada de adrenalina y de diez minutos de duración, McQueen, que interpreta en el filme dirigido por Peter Yates al teniente Frank Bullitt, persigue al volante del Mustang a un Dodge Charger negro conducido por un mafioso de Chicago por las empinadas y serpenteantes calles de San Francisco.
El dueño del Mustang antes de ser vendido este viernes en la subasta de Mecum en Kissimmee, ciudad cercana a Orlando, era Sean Kiernan, cuyos padres usaron el automóvil hasta 1981.
Durante años se pensó que estaba desaparecido pero en 2018, coincidiendo con el cincuenta aniversario del filme de acción que protagonizó el malogrado McQueen (1930-1980), reapareció en escena en la Feria del Automóvil de Detroit.
En la información facilitada por Mecum para la subasta se asegura que McQueen trató varias veces de comprar el Mustang al padre de Sean Kiernan, Bob Kiernan, un coleccionista de coches, pero este siempre le respondió con negativas.
La pregunta que se hacen ahora los aficionados a los automóviles de colección es si el nuevo dueño del Mustang de Bullitt, cuya identidad se desconoce, lo restaurará o lo dejará como está, con todas sus piezas originales y con las señales del paso del tiempo.
De acuerdo con Mecum, una casa de subastas especializada en vehículos de motor antiguos, desde autos y barcos hasta tractores, en el filme se usó un segundo Mustang manejado por especialistas en escenas peligrosas.
Ese coche fue descubierto en México hace poco tiempo, pero ya no tiene el motor original y ha sido sometido a cambios en la carrocería.
El automóvil de Bullitt es la estrella de las sesiones de subastas de Mecum en Kissimmee, que concluyen este domingo, y como tal fue tratado cuando hizo su aparición en el recinto, abarrotado de personas que con sus teléfonos móviles no paraban de fotografiarlo como si fuera una estrella de Hollywood.