Cuando Candice Paterson compró la crema facial en el supermercado, jamás se hubiese imaginado las consecuencias que tendría sobre su piel el producto.
La joven, inglesa de 29 años, ha compartido en sus redes sociales las fatales consecuencias de haberse aplicado la mascarilla. Paterson explica que primero se puso crema por la barbilla para comprobar que no había ningún tipo de reacción, luego se cubrió toda la cara.
«En las instrucciones ponía que se tenía que dejar durante 15 minutos, pero cuando solo llevaba cinco, mi cara ya estaba muy caliente y sensible», ha explicado a The Sun. Cuando Paterson se quitó rápidamente la mascarilla, vio que tenia la cara roja e hinchada.
La chica se aplicó agua fría y se tomó algunos antihistamínicos para calmar su piel, pero desde entonces la nota seca y se va pelando, como si fuera una quemadura solar.
Ante lo que había pasado, la mujer envió un correo electrónico a la marca de la crema y descubrió que la dirección no existía. Luego, intentó ponerse en contacto con ellos a través de Twitter, pero la respuesta también fue negativa. También, ha pedido al supermercado que retire el producto.