Se podría decir que Kalua, este mono de 6 años de la India, ha sido condenado a cadena perpetua por ser un peligro para la sociedad. Y es que, a causa de su adicción al alcohol y su gusto por la carne, es muy agresivo y tendrá que pasarse el resto de su vida en la jaula del zoológico municipal de la ciudad de Kanpur.
Según el Mohammad Sagir, veterinario del recinto, el dueño de este animal era un ocultista que lo aficionó a beber licor y comer carne, tras la muerte del hombre hace unos años, el simio se quedó sin ninguna de sus adicciones y se volvió furioso.
Kalua se liberó y comenzó a pasearse por Mirzapur aterrorizando a los ciudadanos. Hería a la gente, principalmente mujeres y niñas, y mordió a unas 250 personas. Según los medios locales, esto incluso provocó la muerte de una niña.
El equipo del zoo logró capturarlo finalmente y el veterinario intentó que se alimentara con una dieta vegetariana, pero no tuvo éxito. Su conducta no cambió y decidieron mantenerlo en una jaula individual, pues también atacaba a otros monos.