La cantante, actriz y presentadora italiana Raffaella Carrà, famosa por temas como Fiesta, Hay que venir el sur y Caliente, caliente, ha fallecido la mañana de este lunes según afirman medios italianos.
Raffaella Maria Roberta Pelloni (Bolonia, 18 de junio de 1943 - 5 de julio de 2021), conocida por su nombre artístico Raffaella Carrà o La Carrà, fue una cantante, compositora, bailarina, coreógrafa, presentadora de televisión y actriz italiana. Ha presentado diversos programas, la mayor parte en la cadena italiana RAI y en TVE.
Empezó su carrera profesional a la edad de nueve años, tras ser elegida para un pequeño papel en la película Tormento del passato. Raffaella se matriculó a los quince años en el Instituto de Cinematografía, formándose como bailarina. Trabajó en Hollywood en la década de 1960, pero retomó pronto su carrera en Europa, tanto en el cine como en la televisión.
Carrà tuvo relación con Menorca, ya que parte del videoclip de la famosa canción 'Hay que venir al sur' (1978) se grabó en la Isla.
La noticia la ha dado el que fuera su pareja
Sergio Japino, que ha señalado en un mensaje: «Raffaella nos ha dejado, nos ha dejado. Se ha ido a un mundo mejor, donde su humanidad, su inconfundible risa y su extraordinario talento brillarán para siempre», según las mismas informaciones.
Iapino ha explicado a la agencia de noticias Ansa que
ha fallecido a las 16.20 horas locales, tras
una enfermedad que llevaba tiempo atacando su cuerpo y de la que no ha dado más detalles, y la ha descrito como una «mujer fuera de lo común pero dotada de una simplicidad sorprendente» que «no tuvo hijos pero decía siempre que tenía miles de ellos».
Se desconoce por el momento cuándo ni dónde se celebrará el
funeral, pero Iapino ha reconocido que «había pedido un simple ataúd de madera sin terminar y una urna para contener sus cenizas».
Nació como
Raffaella María Roberta Pelloni, su verdadero nombre, el 18 de junio de 1943 en Bolonia (Emilia-Romaña, centro) y con 10 se trasladó a Roma, donde comenzó a tomar clases de danza clásica.
Carrà fue
muy querida en todo el mundo. Su espontaneidad conquistó primero Italia, luego España, donde se convirtió en todo un mito en la conservadora sociedad española de mediados de los setenta, y de ahí dio el salto a Latinoamérica, donde se paseó por los programas televisivos más importantes.