Santiago Segura ha reaparecido este jueves tras sufrir un aparatoso accidente durante el rodaje de Padre no hay más que uno 3. El actor compartió el pasado 11 de febrero, a través de sus redes sociales, una fotografía en la que mostraba una importante herida en su oreja tras desmayarse en su casa: «Perdí el conocimiento en el cuarto de baño y me reventé la oreja contra el suelo (o contra algo, cuando caes redondo de un desmayo ni te enteras…). Me desperté en un charco de sangre. Me tuvieron que dar doce puntos», detalló en aquel momento.
Casi un mes después el actor ha vuelto a posar ante las cámaras y ha asegurado que se encuentra mucho mejor: «Si no me maté fue de milagro. Perder el conocimiento es peligrosísimo», indicó a los periodistas. Eso sí, el artista ha aclarado que los médicos le han diagnosticado el denominado «síncope vasovagal», una enfermedad que se produce cuando la parte del sistema nervioso que regula la frecuencia cardíaca y la presión arterial funciona incorrectamente. Una dolencia que puede desencadenar en desmayos, como en el caso de Santiago.
Segura ha pasado unos meses complicados, ya que la sexta ola de COVID-19 y la gran carga de trabajo le han provocado estrés, ansiedad y tensión acumulada que han afectado a su estado de salud: «Vigilad el estrés y la tensión, son armas mortíferas». Esta dura vivencia ha hecho reflexionar al también director de cine: «No puedo olvidar que si en vez de amortiguar el golpe con la oreja, hubiese caído sobre la nuca o la sien, quizás no estaría aquí contándolo. Moraleja; disfrutad de la vida, que cualquier día, puede ser el ultimo».