Los pediatras aconsejan con motivo de la Semana de la Movilidad que los niños vayan caminando al colegio, ya que aseguran que ese pequeño paseo tiene entre sus efectos positivos una mejora de la autoestima, del rendimiento escolar y previene además enfermedades como la obesidad.
En una nota de prensa, la Asociación Española de Pediatría (AEP) llama la atención sobre los efectos positivos de la actividad física para la salud mental de los niños y adolescentes y recuerda que caminar un kilómetro diario supone realizar hasta dos terceras partes de la actividad física recomendada para la edad pediátrica.
El uso del automóvil incrementa la contaminación atmosférica urbana y disminuye el rendimiento académico, la memoria de trabajo, la atención y empeora la función pulmonar. «Andar rápido disminuye la presión arterial, optimiza la capacidad de regulación de los niveles de azúcar de la sangre y ayuda a reducir el sobrepeso y la obesidad», dicen los pediatras.
La recomendación para los niños y niñas es realizar al menos 60 minutos diarios de actividad física moderada-intensa, de forma regular, aunque, para que sea eficaz, los pediatras recuerdan que «es necesario hacerlo con una intensidad y una frecuencia determinada, que en muchos casos no se cumple».