Hace ya dos meses que Kate Middleton ha pasado a acaparar todas las miradas de la opinión pública. Ni el cáncer de Carlos III ha logrado frenar el aluvión de rumores que no cesan sobre el estado de salud de la princesa de Gales, una situación que se ha agravado esta semana con la polémica de la imagen retocada en la que aparece junto a sus hijos, y por la que un día después de su publicación tuvo que pedir disculpas.
En medio de toda esta maraña de misterio y teorías conspiratorias —el diario The Guardian y otros medios las han bautizado como 'Katespiracies'—, la periodista norteamericana Jessica Reed Kraus ha dado a conocer nuevos detalles sobre la operación a la que fue sometida Kate Middleton a mediados de enero y que la ha mantenido desde entonces alejada de la vida pública.
Reed, que cita a tres fuentes diferentes, ha señalado que la mujer del príncipe Guillermo no habría tenido una cirugía abdominal, como informó en su día el Palacio de Kensington. "Tuvo una operación en sus intestinos y se está recuperando con una bolsa", sostiene.
Según esta periodista, este tipo de intervenciones requieren de un periodo de curación de "doce largas semanas". El motivo por el que palacio no contó lo que realmente pasaba habría sido para "no manchar su imagen o avergonzarla", y por ello decidió dar "estas vagas explicaciones que les han salido como un tiro por la culata a raíz de las extrañas imágenes con Photoshop que publicaron", añade.
Ahora, la princesa de Gales "está luchando por su recuperación tras la cirugía", prosigue Reed, que ha querido distanciarse de todas las teorías que surgen en internet. En su opinión, el trabajo de comunicación de palacio fue "francamente terrible" al querer proteger la privacidad de Kate Middleton. "Fue un paso en falso tras otro. Todos deberían ser despedidos, se podría haber manejado de manera más inteligente", ha aclarado en un mensaje publicado en redes sociales.
En este sentido, Reed ha señalado que "están sucediendo muchas cosas" dentro de la familia real británica en estos momentos y no culpa a la opinión pública por especular al respecto, "especialmente teniendo en cuenta lo extraños que han sido los encubrimientos".
Sin embargo, "ahora que tengo clara la situación", añade, "no me siento motivada a seguir más teorías sobre la ausencia de Kate. Ella se está recuperando y probablemente también esté lidiando con el estrés emocional", concluye la periodista.