Emoción, nervios y también muchas ganas. Este era el ambiente que se respiraba desde el sábado a primera hora de la mañana en la biblioteca municipal de Porreres. Allí, se disputa este fin de semana el décimo campeonato mundial de Scrabble en catalán. Hoy se jugarán las partidas finales que coronaran al nuevo campeón.
Pese a ser un juego, la competitividad está asegurada. Este año participan en el concurso más de sesenta jugadores llegados de diferentes puntos de la Península y también de la Isla. Entre ellos, el doble campeón del mundo, Carles Cassanyes o uno de los pioneros y adaptador de este juego al catalán, Lluís de Yzaguirre.
Durante toda la jornada del sábado, el ingenio y la habilidad se retaron en hasta seis partidas de uno contra uno en las que, como en todo juego, también hay un poco de suerte. La concentración fue protagonista en cada una de las partidas, y es que lograr la mejor combinación con las letras adecuadas puede hacer ganar o perder.
Este campeonato es el único que concentra diez partidas en un solo fin de semana además de acoger a los mejores jugadores del mundo lo que supone además un aliciente extra.
El reto de las palabras continuará durante todo la mañana de este domingo. Se disputarán cuatro partidas finales con las que se definirá el nuevo campeón de esta modalidad que va sumando adeptos día tras día.