El presidente francés, Emmanuel Macron, dio las gracias este viernes a los implicados en la restauración de Notre Dame de París por haber «convertido el carbón en arte», durante su visita a las obras, que sirvió para descubrir el nuevo aspecto de su interior, más luminoso y con muros blanqueados.
«La conmoción de la reapertura será tan fuerte como la del incendio, pero será una conmoción de esperanza», señaló el jefe de Estado en un discurso pronunciado en el interior del templo. Lo hizo ante algo más de 1.300 trabajadores, expertos y mecenas de esta restauración y que pudieron ingresar al templo renovado sonrientes, asombrados y sin dejar de tomar fotos con sus móviles durante la última visita a las obras antes de la gran reapertura, el 7 y 8 de diciembre tras cinco años de trabajos.