Tras una lucha incansable contra el cáncer que padecía, la joven sevillana Belén Domínguez ha fallecido este sábado a los 31 años en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid, donde estaba ingresada desde diciembre de 2023 por un cáncer de médula.
La joven padecía concretamente un glioma difuso de la línea media de grado 4, un extraño agresivo tumor intramedular que le fue diagnosticado cinco meses antes de su hospitalización y que se trataría de un caso único en España, como relata el Diario de Sevilla, que ha confirmado su fallecimiento.
A pesar de la gravedad de su cáncer, Belén se mostraba siempre positiva en redes sociales y contaba su día a día desde el hospital. En Instagram, de hecho, llegó a acumular más de 200.000 seguidores. Con ellos compartía diariamente su evolución médica y los tratamientos que recibía.
El pasado mes de octubre, además, llegó a publicar su propio libro La vida es bonita incluso ahora, donde relataba su trayectoria vital y su forma de enfrentarse a este cáncer. Así, contaba en ella como, a pesar de los malos momentos vividos, siempre había una razón para luchar y seguir adelante.
En sus redes sociales, además, compartía también numerosas fotografías con todo aquel que le visitaba. Alejandro Sanz, Mario Vaquerizo, Alaska fueron algunos de los numerosos rostros que pasaron por la habitación en la que estaba ingresada para animarla y apoyarla.
La joven, además, llegó acercarse profundamente a Dios durante su último tratamiento y llegó a recibir una carta del papa Francisco. Además de la fe, siempre contó con el apoyo inquebrantable de su familia, sus padres Charo y Francisco, quienes se trasladaron a Madrid para acompañarla en cada paso del tratamiento y de su prometido Emilio, quien siempre fue un apoyo enorme y con quien quería casarse aunque fuera en la capilla del hospital.
DEP