Los diseños de Pokémon suele estar inspirado en plantas o animales, aunque hay todo tipo de criaturas. Sin embargo, lo que los científicos no se podrían haber imaginado es que al descubrir una nueva especie de pez, este se parecía a uno de estos seres ficticios.
A 3.200 metros de profundidad, en el Cañón de Monterey, los científicos del Monterey Bay Aquarium Research Institute (MBARI) han descubierto una nueva especie de pez caracol. El animal, bautizado como Careproctus colliculi, o pez caracol rugoso, mide apenas 9 centímetros y destaca por su piel gelatinosa, cabeza redondeada y aletas pectorales anchas.
Un detalle muy llamativo de su figura es que sus radios superiores sobresalen y el disco en su vientre le permite adherirse al fondo o a otros animales para sobrevivir. Toda una noticia que rápidamente se hizo viral a través de redes sociales. Porque, al igual que la reciente expedición en Argentina, este se emitió a través de Youtube.
Sin embargo, lejos de hacerse famoso por la importancia de esta nueva especie, lo que más destacaron los usuarios fue su parecido con un Whiscash, un Pokémon de la tercera generación de la franquicia. El Pokémon, si bien está inspirado en los peces gatos, lo cierto es que también guarda parecido con este nuevo pez caracol.
Aunque lo cierto es que este 'pokémon' no fue el único que encontraron los científicos durante la expedición. Porque, si bien lo cierto es que resulta muy complicado identificar a este tipo de peces en las aguas profundas, debido a su tamaño, lo cierto es que se hallaron dos especies más.
Por un lado, el pez caracol oscuro, que como su nombre indica tienen una tonalidad negra y la boca horizontal y; por otro, el pez caracol esbelto, cuyo cuerpo es más alargado. Sin embargo, por el momento los científicos solo han captado vídeos y aún no cuentan con especímenes físicos de dichos animales.
Por ello, por el momento el gran hito, más allá de su parecido, es haber encontrado nuevos peces abisales en a apenas 100 kilómetros de distancia de las costas de California. Y es que, como así han destacado desde el MBARI existen en total más de 400 especies de este tipo de peces caracol. Gracias a su capacidad de adaptación, pueden vivir en todo tipo de hábitats, desde charcas intermareales hasta las profundidades oceánicas.