"Hola a todos. Estoy aquí para comunicaros que me retiro del tenis profesional", comenzó el vídeo de Rafa Nadal en el que anunciaría que colgaba la raqueta el 10 de octubre de 2024. Un emotivo mensaje en el que aparecía el balear explicando su decisión y recordando todo lo que el tenis le había dado, mientras se reproducían imágenes de grandes momentos en pista, con sus grandes rivales, así como planos de su vida más personal.
El mensaje, tan esperado como temido, paralizó el mundo del deporte. No era para menos, ya que se retiraba una leyenda, el rey de Roland Garros, uno de los deportistas españoles más importantes de la historia y uno de los miembros del 'Big 3'. El legado que ha dejado Nadal es indiscutible, el cual, parte de este ha quedado materializado en su Academia en Manacor. No obstante, aunque la vida del mallorquín mucho ha cambiado en este último año, continúa ligado al deporte.
En estos meses, Nadal ha apostado por pasar más tiempo con su familia, por los negocios, su Academia y por disfrutar de otros deportes como el golf. Aunque su despedida no fue la soñada, Nadal recibió un homenaje a la altura de su leyenda el pasado 25 de mayo en la Philippe Chatrier, la pista donde más triunfó.
Con Federer, Djokovic y Andy Murray y una placa en la Central con su huella para la eternidad, Francia y todos sus seguidores se rindieron al español. París, como ya lo hiciera en los Juegos Olímpicos al llevar la antorcha, le volvió a reconocer.
Pocos meses después las buenas noticias llegarían para él y su familia. El balear y su mujer, Mery Perelló, se convirtieron en padres de su segundo hijo, Miquel, el 7 de agosto.
Nadal se alejó de las pistas y empezó a convivir con una nueva rutina que nada tendría que ver con la de antaño. "Es un poco difícil decidir cuál es el día a día, porque no hay una rutina como había antes. Antes me levantaba con despertador. Ahora tengo un niño que me despierta a las siete, más o menos", confesó en unas declaraciones en el pódcast de NDL Pro Health.
La Academia, su gran proyecto
Además, Nadal, aunque confesó que llevaba tiempo sin coger una raqueta, se sigue manteniendo muy activo: "Estoy haciendo gimnasio tres veces a la semana. Cardio, fuerza y rutinas básicas de cuando jugaba para proteger las rodillas y los hombros".
Nadal también ha estado centrado en uno de sus grandes proyectos, su Academia. De hecho, se volvió a reencontrar con Federer a mediados de Julio cuando el suizo visitó las instalaciones de la academia del español. Federer asistió debido a que tenía a sus dos hijos participando en uno de los campus que se estaban desarrollando en la misma.
La Academia de Rafa también recibió la visita del actual número tres del mundo, Alexander Zverev, el cual estuvo entrenando allí unos días con Toni Nadal y el propio Rafa le estuvo dando algunos consejos para mejorar su tenis.
Hace tan solo unos días, el mallorquín recibió un nuevo reconocimiento: ser investido 'honoris causa' por la Universidad de Salamanca. Nadal se convirtió en el primer deportista en recibir dicha distinción por la USAL el pasado 3 de octubre. El balear fue recibido por la ciudad con los brazos abiertos y dejó un gran discurso sobre todas las lecciones vitales que le había enseñado el deporte.
Ahora, Nadal se encuentra disfrutando de una nueva vida en la que puede pasar más tiempo con su familia y disfrutar de la práctica de otros deportes como el golf o el fútbol. Además, de ilusionarse con nuevos proyectos como los suplementos y el podcast que ha lanzado junto con Cantabria Labs, NDL Pro-Health o su Fundación, así como la Rafa Nadal Academy.