A medio camino de Cala Turqueta y Macarella, dos de las playas más icónicas de Menorca, se encuentra Morvedra Nou, un agroturismo de 24 habitaciones colmado de naturaleza y tranquilidad propiedad de la familia Vivó cuya quinta generación tuvo la idea de convertir su finca en hotel rural en 1998.
Una visión que sigue en pie 23 años después y que ha sido merecedora de recibir la primera distinción que concede la Agencia de la Reserva de la Biosfera a un establecimiento hotelero que garantiza el crecimiento sostenible de Menorca y una actuación responsable con el medio ambiente, la sociedad, la economía y la cultura que lo rodea. Por si esto fuera poco, este 2020 el hotel rural Morvedra Nou se ha certificado también como alojamiento Starlight desde el que poder disfrutar de la calidad del cielo nocturno de Menorca.
ORÍGENES. Los orígenes del predio de Morvedra Nou, al sur de Menorca, se remontan al siglo XVII y, de hecho, las primeras noticias de esta típica casa de payés menorquina datan del año 1615. Propiedad de la familia Bendito Vivó desde hace cinco generaciones, fueron los hermanos Enrique y Victoria los que acabaron tomando la decisión de transformarla en hotel rural en 1997 para abrir al año siguiente, convirtiéndose en el segundo establecimiento de estas características en abrir en la isla.
“En Mallorca conocíamos algunas experiencias que se habían puesto en marcha y nos pareció buena idea llevar a cabo el proyecto”, explica Victoria Bendito, directora desde sus inicios. Tras una inversión de mas de 700.000 euros, se acondicionaron 19 habitaciones en el edificio principal, tres en la planta superior y las dieciséis restantes en la planta baja.
También se adecuó una zona de recepción, salón, cocina y restaurante con el propósito de ofrecer la mejor gastronomía local a los huéspedes. Se ajardinó el entorno más inmediato a la casa y se construyó una espectacular piscina. Al estar situados en medio del campo y sin poder disponer de alcantarillado, se construyó también una depuradora para el tratamiento de las aguas residuales.
El establecimiento se estrenó en mayo de 1998 con la llegada de los primeros clientes extranjeros. “Recuerdo que fueron sobre todo familias inglesas y alemanas las que tuvimos que posteriormente al llegar la temporada de verano, se mezcló con turismo nacional”, detalla Victoria Bendito. “Desde el primer momento decidimos abrir seis meses al año desde mayo hasta octubre, unas fechas de funcionamiento que hemos seguido manteniendo con el paso de las sucesivas temporadas”, detalla.
La propuesta de Morvedra Nou no solo cuajó entre sus huéspedes, sino que poco a poco empezaron a fidelizarlos y conseguir que se convirtieran en habituales. “Entonces no teníamos ni página web y la comercialización era a través de agencias, turoperación y el boca oreja”, señala. “Nuestro deseo era ofrecer un trato amable, cercano y una invitación al relax, a disfrutar del entorno, de la isla, de su cocina”, añade. El restaurante siempre se ha mantenido abierto a clientes de fuera y dentro del hotel.
AMPLIACIÓN. En 2015 llevaron a cabo una ampliación del hotel con la creación de cinco habitaciones hasta completar las 24 actuales. Con la nueva construcción también se instalaron unas placas solares para alimentación del nuevo espacio.
La reforma también vino acompañada de un cambio en la orientación del establecimiento, que hasta la fecha se había dirigido esencialmente a un público familiar, para pasar a ser solo para adultos. “No fue un paso fácil pero nos dimos cuenta de que la clientela nos demandaba un hotel más tranquilo y decidimos enfocarnos en esta línea”, comenta Victoria Bendito.
Este cambio ha aumentado la sensación de silencio y relax, propiciando que se hayan podido potenciar espacios, como su terraza para cenas románticas, u otros servicios como los masajes que se llevan a cabo en el jardín. “Ahora tenemos en proyecto poner en marcha lo que llamamos baños de bosque dentro de nuestra finca, una experiencia sensorial muy gratificante que hasta ahora organizábamos para los clientes fuera de nuestro hotel, pero hemos encontrado un espacio ideal sin salir de Morvedra Nou”, explica Victoria Bendito.
En paralelo y coincidiendo con la proclamación de Menorca como la primera destinación del Mediterráneo en obtener la doble acreditación como reserva y como destino Starlight que goza de excelentes cualidades para la contemplación de los cielos estrellados, les animó a optar la acreditación de Alojamiento Starlight ya que Morvedra Nou está emplazado en una de las zonas más oscuras del sur de Menorca, sin contaminación lumínica. “Cuando se celebró el Congreso Starlight, nos postulamos enseguida y accedimos a instalar un fotómetro en el hotel para medir la luz. Este verano hemos celebrado unas cenas temáticas coincidiendo con la lluvia de perseidas de agosto y ha sido todo un éxito pese a las restricciones de aforo provocadas por la pandemia”, explica la directora. El siguiente paso ha sido adquirir un telescopio que han instalado en una de las eras junto a un chill out. “A los clientes les ha encantado la experiencia”, añade.
SOSTENIBILIDAD. Aunque la pandemia ha puesto en cuarentena algunas de las iniciativas que tenían previstas en Morvedra Nou, no han dejado por ello de actuar y planificar nuevas acciones en su compromiso de sostenibilidad, que se ha visto reforzado después de recibir el sello Reserva de la Biosfera. “El hecho de haber sido el primer establecimiento de Menorca que lo ha recibido ha supuesto un honor, pero también una mayor exigencia. Gracias a las subvenciones que otorga el Govern balear, vamos a poder crear un planta fotovoltaica con la que conseguiremos autogenerar el 60% de la energía que utiliza el hotel. Asimismo, tenemos previsto instalar un sistema de osmosis para evitar tener que consumir agua embotellada, un hecho que nos ayudará a reducir la generación de plásticos de un solo uso en la que ya veníamos muy concienciados desde hace años. En este mismo sentido, hemos pasado a ecológicos todos los productos de limpieza de cocina y lavandería que utilizamos”, explica la gerente.
Desde el año pasado, Morvedra Nou también ha pasado a formar parte del Club de Ecoturismo de España. “Este 2021 vamos a poder poner en marcha un huerto para abastecernos en nuestra finca de productos de proximidad. Precisamente tenemos la suerte de tener como vecinos la finca de Morvedra Vell, donde elaboran un aceite ecológico que podemos ofrecer a nuestros huéspedes”, concluye Victoria Bendito.