A la entrada de Santanyí, en el polígono s'Olivó, se alza una magnífica construcción, de líneas rectas y limpias, capaz de combinar en sus paredes el metal con el marés para conseguir un efecto tan atractivo como interesante. En la fachada principal, un pequeño letrero invita a descubrirlo: Durán.
La centenaria firma mallorquina ha inaugurado recientemente un edificio de unos 2.500 metros en un solar de 7.200 metros cuadrados. No se trata de una nave industrial al uso en un polígono de nueva creación. Durán ha querido volver a sus orígenes y crear en Santanyí un centro que permita a sus clientes una nueva experiencia de compra, basada en la interacción y en una oferta amplia, sofisticada y global.
El nuevo edificio es obra del estudio mallorquín AR3 Arquitectes y es en sí mismo una declaración de intenciones. Por fuera, su propuesta visual impone. La fachada metálica se integra en el paisaje y modifica su tonalidad a medida que la luz del día se transforma. A pie de tierra, el muro de marés remarca las raíces de la empresa e invita a descubrir el interior. La combinación de ambos materiales ayuda a filtrar la luz natural que permite disfrutar el contenido en todo su esplendor. La experiencia de compra que propone Durán en su nuevo centro de Santanyí es innovadora y motivante. Propone al visitante una participación activa en el proceso de compra, invitándole a la creación y proporcionando espacios de trabajos que permiten planificar y recrear el proyecto. El centro de Santanyí se añade a los ya existentes de Palma, Calvià y Alcúdia con la idea de mostrar todas las posibilidades de materiales destinados a la construcción en un ambiente cálido, confortable y profesional.
El showroom, diseñado por la empresa MBDA, transporta al cliente a un espacio concebido para transformar la experiencia de compra en un proceso creativo completo. El centro cuenta también con un amplio espacio dedicado al autoservicio profesional en ferretería, fontanería y electricidad.