Margalida Ramis, CEO de Grupotel Hotels & Resorts, considera que la temporada ha sido «positiva». «El balance es positivo. Hemos tenido una temporada estable, con buenos niveles de ocupación, especialmente en los meses centrales y un buen comportamiento en septiembre. Los precios se han podido mantener, pero el margen de incremento empieza a tocar techo. La demanda muestra una mayor sensibilidad al precio y eso obliga a competir más por valor y menos por volumen», indica.
Ramis no escatima elogios para el Pacto por la Sostenibilidad al que reclama acciones concretas. «Es una iniciativa muy necesaria, aunque aún en construcción. La sostenibilidad requiere un consenso entre sector público, empresas y ciudadanía, y esto esta costando en exceso. Ahora toca aterrizarlo y esto depende de todos nosotros. Es muy importante que se mantenga el diálogo y se traduzca en acciones concretas que hagan compatible la prosperidad económica con la preservación del entorno y la cohesión social. Es un proyecto estratégico a largo plazo y no podemos esperar ya una solución mágica inmediata a corto», manifiesta.
Ramis reclama que cualquier decisión sobre el número de plazas se adopte desde criterios objetivos. «El crecimiento descontrolado no es sostenible, pero las decisiones deben basarse en criterios objetivos de capacidad de carga, calidad y equilibrio. En el caso del alquiler vacacional, sí parece necesario un mayor control para evitar la competencia desleal y los efectos sobre la vivienda residencial», argumenta. Respecto a cómo puede Mallorca mejorar como destino turístico, Ramis reclama una mayor apuesta por la sostenibilidad. «Mallorca necesita avanzar hacia un modelo más equilibrado, donde la sostenibilidad no sea un eslogan sino una ventaja competitiva. Eso pasa por invertir en infraestructuras verdes, movilidad sostenible, digitalización y, sobre todo, en formación. La calidad del destino dependerá, cada vez más, de la calidad de las personas que lo hacen posible», indica y añade que «ha fallado el control y la coordinación institucional» con el alquiler vacacional.
Ramis se muestra satisfecha con el convenio firmado «porque da estabilidad al sector y reconoce el esfuerzo de los trabajadores, que son la base del servicio y la experiencia turística». Finalmente, respecto a la falta de personal cualificado, Ramis reconoce los problemas. «La falta de personal cualificado sigue siendo uno de los grandes desafíos. Nosotros en algunos casos puntuales facilitamos alojamiento. Pero esta solución no es estructural: Mallorca necesita una estrategia conjunta para hacer frente al problema de la vivienda», acaba explicando Ramis.