El director general de Planificación y Centros de la Conselleria de Educación, Guillem Estarellas, ha anunciado a los sindicatos que el Govern reducirá la plantilla en los centros educativos en 500 y no en 600 plazas, tal como estaba previsto inicialmente, lo que ha provocado que, de momento, el STEI, UGT, CCOO y Anpe no convoquen ninguna huelga en este sector, aunque no la descartan para finales de septiembre.
Así lo ha informado a Europa Press el secretario general del sindicato STEI, Biel Caldentey, quien ha revelado que en la reunión que han mantenido esta mañana Estarellas y la directora general de Recursos Humanos, Margalida Pizá, con los sindicatos, les han trasladado que el Govern va a hacer un "esfuerzo" para aumentar entre 50 y 100 plazas más la oferta de plazas vacantes para funcionarios interinos docentes en los centros educativos para el próximo curso escolar.
"Por tanto, si inicialmente la reducción de plantillas afectaba a 600 plazas, ahora se ha disminuido a 500", ha recalcado Caldentey, quien ha precisado que a pesar de que los sindicatos están en desacuerdo con esta medida porque todavía hay profesores que pueden quedarse sin trabajo, han valorado que su "presión" ha logrado "algún efecto".
Los citados sindicatos han anunciado que, al inicio del curso, harán un seguimiento puntual en cada centro educativo de las islas para detectar las necesidades de profesorado, así como la "posible masificación" de las aulas, los ratios, los equipamientos educativos, los recursos para la atención a la diversidad, la formación del profesorado, los departamentos de orientación y las becas y ayudas a las familias.
"En función del malestar que haya y de las reivindicaciones, no descartamos que a finales de septiembre podamos convocar una huelga", ha avisado Caldentey, quien ha indicado que con independencia de que la Conselleria haya reducido su intención de disminuir la plantilla, hay un "contexto de confrontación" entre el Gobierno y los empleados públicos.
Finalmente, los sindicatos han exigido a la Conselleria de Educación que "centre su actividad en la mejora y resolución de los problemas que presenta nuestro sistema educativo y que no haya represalias ante las reivindicaciones en defensa de la enseñanza pública por parte de la comunidad educativa".