Unos 80 ginecólogos que trabajan para la sanidad pública balear (aproximadamente el 70 % de la plantilla) y 9 que trabajan en la sanidad privada han firmado un escrito solicitando la retirada del proyecto de ley de reforma del aborto que defiende el ministro Gallardón.
«Como obstetras que en Balears tenemos experiencia diaria en el cuidado de las mujeres embarazadas, solicitamos la retirada de dicho proyecto de ley», explican en la carta y añaden que «creemos en la pertinencia de una normativa similar a la vigente en los países más avanzados y en la inmensa mayoría de los países europeos».
Así lo explicaron ayer los ginecólogos Miguel Reyero y Esher Montoliu (Son Espases), Adolfo Marqués (Son Llàtzer), Andrés Calvo (Inca) y Agustín Hernández (Manacor) en representación de sus compañeros, apuntando que «nuestra experiencia diaria nos indica que en casos de malformación del feto, la mayoría de las mujeres de todas las creencias y opciones políticas, opta por la interrupción voluntaria del embarazo».
Estos profesionales creen que, de aprobarse la reforma legislativa tal y como está propuesta actualmente, «las mujeres con medios económicos viajarán fuera de España para abortar» y las que no tengan recursos «lo harán de forma clandestina».
«Con cualquier legislación la mayoría de las mujeres de las mujeres que están decididas a interrumpir su gestación lo hacen», explican en su escrito que será entregado a la Delegación del Gobierno y probablemente a la Conselleria de Salut.
Internet
Los ginecólogos explicaron que el 90 % de los abortos que se realizan en Balears se llevan a cabo con fármacos y dieron la razón a los grupos feministas de que se ha detectado un incremento de la venta de estas pastillas a través de internet.