Cobrar el impuesto turístico (ecotasa) en puertos y aeropuertos, negociar el establecimiento de un tarifa plana en los vuelos interinsulares y reclamar la cogestión de los aeropuertos de Balears, son las tres cuestiones que quiere negociar el Govern balear con la Administración central en los próximos meses.
El conseller de Territorio, Energía yi Mobilidad, Joan Boned, en este sentido, ha pedido una reunión oficial con la ministra de Fomento, Ana Pastor, para plantearle estas reivindicaciones, que son calificadas por el Ejecutivo autonómico como «fundamentales para Balears».
El conseller remitió ayer una carta a la ministra pidiendo el encuentro oficial, pese a estar el Gobierno que preside Mariano Rajoy en campaña encubierta de cara a a las elecciones generales de final de año.
Impuesto turístico
De los tres temas, el Govern puntualiza que está estudiando todas las opciones para cobrar el nuevo impuesto turístico ya sea en puertos y aeropuertos, alojamientos turísticos e incluso aerolíneas.
Por esta razón, el conseller Boned quiere reunirse con la ministra Pastor para abordar la disponibilidad del Gobierno central a facilitar el cobro en los puertos y aeropuertos, como una de las opciones que están sobre la mesa en estos momentos.
El Ejecutivo entiende que esta opción puede plantear algunos problemas en Bruselas por tratarse de un impuesto, porque no está claro, todavía, que queden eximidos lo residentes de las Islas.
El conseller también negociará con Pastor el establecimiento de una tarifa plana para los vuelos interinsulares que garantice un precio adecuado para los ciudadanos de Balears, rondando los 30 euros por trayecto. Pedirá a la ministra que se replantee la actual situación y que se fije una tarifa plana para estos vuelos interinsulares, que sustituiría el descuento que se aplica a los residentes exclusivamente para estos trayectos y que lo mantendría en el resto.
Boned reclamará, asimismo, que Balears pueda asumir la cogestión de los tres aeropuertos de las Islas: «Es imprescindible que el Govern, junto con otras instituciones públicas de las Islas, participe en la toma de las decisiones sobre una cuestión clave para la economía balear», afirma.