La Assemblea de Docents ha realizado un llamamiento a la huelga educativa prevista el próximo 15 de diciembre «como única alternativa» reclamar la mejora del presupuesto en este ámbito y contra la aplicación de la Lomce, después de que, ha recriminado, el conseller de Educación y Universidad, Martí March, haya «agotado el diálogo» en este sentido.
«Es la imagen que ahora mismo tenemos de March, un conseller cuya política educativa es hacerse fotos, prorrogar recortes, aplicar la Lomce sin minimizaciones y no escuchar a nadie», han manifestado desde la entidad en rueda de prensa, en la que han lamentado la «rotura unilateral de la negociación cinco meses después de haber empezado a andar el nuevo gobierno».
Es por eso que se han preguntado «cómo hemos llegado hasta aquí» puesto que desde el Comité de Huelga «siempre hemos mantenido que había recorrido para alargar las negociaciones el tiempo que hiciera falta, si esto nos debía conducir a un buen acuerdo y a la resolución definitiva del conflicto».
«Por el contrario, March decidió cerrar un acuerdo incluso antes de que la Assemblea pudiera llevar a los centros la votación de su propuesta», lamentan.
Tal y como han señalado, la «inédita» consulta que se llevó a cabo durante los días 14 y 15 de octubre, con una participación «sin precedentes» en la historia sindical del mundo educativo en Balears y que mostró «un rechazo bastante amplio entre los docentes a la propuesta de acuerdo firmada por STEI, FECCOO y la Conselleria, ha sido ignorada completamente por el conseller, por el Govern y por los partidos políticos que forman parte».
Días después de la consulta, con los resultados definitivos, éstos fueron entregados en el registro de la Conselleria de Educación, «buscando una respuesta que nunca ha llegado. Ningún contacto ni formal ni informal desde entonces. Ni por parte del conseller ni de ningún miembro del Govern, ni por parte de ningún miembro de los partidos del equipo de gobierno -PSIB y MES-.
«March repite una y otra vez que dialoga, que escucha, que tiene las puertas abiertas de la Conselleria, cuando en realidad ha ignorado a los más de 3.300 docentes que dijeron no al acuerdo, y a los casi 5.000 que participaron». «Es su permanente desprecio por los procesos participativos y a todo aquello que se sale de su rumbo», remarca la Assemblea.
La entidad ha subrayado cómo en las últimas semanas el proyecto de presupuestos para 2016 «no respondía a las promesas electorales de los partidos que forman el gobierno», y «conocer el magro aumento del presupuesto educativo nos ha permitido entender el porqué de las negativas reiteradas del conseller a explicar, en el marco de las negociaciones, cualquier detalle relacionado con el presupuesto, aunque en cada reunión se le reclamaba».
«Lo que él sabía y nosotros intuíamos, ahora lo sabe la sociedad», han subrayado desde la Assemblea, recalcando que faltan aproximadamente 40 millones de euros para que el presupuesto educativo «se parezca un poco a lo que se prometió y se pueda ser mínimamente optimista. El sistema educativo de Baleares tiene urgencias que no pueden esperar».