El Consejo Balear del Agua ha acordado este lunes elaborar un plan de sequía, un instrumento legal necesario que actualmente no existe en las islas, así como potenciar las desaladoras y acometer una campaña de concienciación para hacer frente a la situación de prealerta de Mallorca.
El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha asegurado que el Govern trabaja en dicho plan que el anterior Govern no incluyó en el Plan Hidrológico de Balears, por lo que se trabaja sobre «un borrador que el anterior Pacto de Progreso dejó terminado el 2011», ha informado el departamento autonómico en un comunicado.
El conseller ha reivindicado la necesidad de hacer «un esfuerzo mental de cambio de paradigma». «Situar las desaladoras como la base del sistema para complementarlo con los recursos naturales que hemos ahorrado durante el verano», ha dicho Vidal, y no al contrario, cómo se ha hecho hasta ahora, teniendo en cuenta que Mallorca se encuentra en pre-alerta por sequía y Eivissa ya lo está.
Vidal ha presidido esta tarde la reunión del Consejo Balear del Agua que ha tratado dos temas antagónicos: la necesidad de aprobar un plan de inundación para las Illes Balears y la de un plan de sequía.
En relación con el de inundación, aunque, hoy por hoy, este riesgo no está presente hay que elaborar el instrumento que se tendrá que aplicar en caso de que se pueda dar esta emergencia.
En la otra cara de la moneda está la sequía, un asunto «estratégico que preocupa en la conselleria».
Vidal ha anunciado que se pondrán en marcha, de manera inmediata, acciones concretas para incrementar el agua disponible, básicamente a través de las desaladoras.
En la de Palma, se incrementarán las líneas producción, la de Andratx se conectará a través de las redes municipales y a la de Alcúdia se la dotará de más potencia.
Mientras, en Eivissa, se llevan a cabo una serie de acciones para conectar la desaladora de Santa Eulària, que el Govern recibirá en unas semanas.
Estas acciones, según el conseller Vidal se complementarán con la gestión de la demanda de suministro de agua, mediante campañas de concienciación ciudadana para «avisar» de su falta y de que es un recurso escaso que hay que «cuidar».
El Govern se apoyará en los ayuntamientos para que redacten ordenanzas en caso de que haya restricciones para priorizar los usos admitidos. En la misma línea, se dotarán a los núcleos de poblaciones con más de 20.000 habitantes, para que elaboren un plan de emergencia ante la sequía.
En relación con la sequía agraria existente, el conseller ha señalado que espera que el viernes, en la tercera reunión de la comisión de seguimiento técnica creada por esta situación, se acuerden y concreten con los sector las ayudas para la compra de alimento y semillas para el ganado.
«Hace falta hacer frente a la crisis del agua y adoptar medidas entre todos», ha dicho Vidal.