La Vicepresidencia y Conselleria de Innovación, Investigación y Turismo, a través de la Dirección General de Turismo, ha iniciado expedientes sancionadores a ocho inmobiliarias con multas que podrían ascender a los 200.000 euros por comercializar alquiler turístico ilegal.
Así lo han dado a conocer tras presentar este viernes los resultados de la primera campaña de Inspección orientada hacia las grandes comercializadoras de viviendas turísticas.
Durante la primera semana de la campaña, los inspectores de Turismo han visitado a un total de 12 inmobiliarias o centrales de reservas en las que habían encontrado indicios de que anuncian alquiler de estancias presuntamente turísticas en una tipología de viviendas no permitida por la ley de turismo actualmente en vigor.
Las visitas, que se han realizado conjuntamente con inspectores de la Agencia Tributaria de Baleares, se han llevado a cabo en Palma, Pollença, Colonia Sant Jordi, Cala d'Or, Capdepera y Artà.
De las 12 empresas controladas, los inspectores han constatado posibles infracciones en ocho de ellas, dado que comercializaban entre tres y 80 viviendas ilegales en edificios plurifamiliares.
Las sanciones correspondientes pueden ir desde los 6.000 euros hasta los 40.000 euros por empresa y ya se han iniciado los procedimientos sancionadores, que podrían sumar un total de 200.000 euros.
Según ha explicado la directora general de Turismo, Pilar Carbonell, los inspectores seguirán durante las próximas semanas con inspecciones conjuntas con la ATB a grandes comercializadoras de oferta ilegal de alquiler turístico.
Asimismo, el Govern ha recordado que la actual ley prohíbe la comercialización de estancias turísticas en viviendas ubicadas en edificios plurifamiliares y que el proyecto de ley que modificará la regulación del alquiler prevé la posibilidad de comercializar estancias turísticas en edificios plutifamiliares, cumpliendo una serie de requisitos y siempre que se haga en las zonas aptas.