Los esfuerzos de los equipos de rescate prosiguen este viernes en la zona afectada por la grave tormenta mortal que golpeó el nordeste de Mallorca con un objetivo primordial: encontrar a Artur, el niño desaparecido en la riada, que las fuentes oficiales en un principio dijeron que tenía 5 años aunque fuentes próximas a la familia han confirmado que tiene 8.
Unos 150 efectivos han mantenido la búsqueda durante toda la noche, unas labores que hasta el momento no han fructificado. Sin embargo, desde primera hora de este viernes se intensifican los trabajos cuyo peso recae en los bomberos, la UME y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado asistidos por maquinaria.
Nadie arroja la toalla, especialmente después de que este jueves por la tarde fuera localizada la mochila del pequeño cerca de la rotonda de Son Carrió, relativamente próxima a la zona donde fue localizado el cadáver de su madre. Los objetos que ya han sido reconocidos por la familia.
En las últimas horas el triste balance de víctimas ascendió hasta las 12, con los hallazgos de los cuerpos de un matrimonio alemán de sexagenarios cuyo coche fue arrastrado por el agua cerca de Artà.
En las labores de búsqueda, que este viernes pese a ser 12 de octubre y Fiesta Nacional se mantienen sin cambios, participan numerosos efectivos terrestres asistidos por perros especializados, así como buzos, helicópteros y barcos en el mar.
Está previsto que este viernes por la tarde los Reyes visiten la zona afectada por la devastadora tormenta, después de presidir los actos conmemorativos en Madrid.