El conseller de Educación, Martí March, ha pedido este martes a Vox que no cree «alarmismo» y ha asegurado que «los centros de educación de Balears (donde se impartirá clase de religión islámica) no serán centros de islamización, ni mucho menos», ha aseverado.
March ha pedido ser «serios y rigurosos» tras la decisión del Govern de que se imparta religión islámica en diez centros docentes de Baleares en el curso 2020/2021.
El titular de Educación ha recordado que en Madrid y Andalucía, donde Vox apoya a sus gobiernos autonómicos, se imparte religión islámica y ha garantizado que en Baleares «se aplicará la ley como toca y que la inspección educativa hará su trabajo».
El conseller ha solicitado a Vox que sea un partido «serio y riguroso» y ha defendido el cumplimiento de la Constitución Española para respaldar la enseñanza de la religión en las aulas, de cualquier credo: «O todas o ninguna», ha apostillado.
Por su parte, el diputado de Vox Sergio Rodríguez ha exigido que los docentes que impartan esta asignatura cumplan con todos los requisitos requeridos a cualquier docente, también el conocimiento del catalán, y ha pedido al conseller que «garantice» que no habrá discriminación por sexos en las clases de religión islámica.
También ha solicitado a March que estos diez centros pilotos «no se conviertan en guetos islamistas, algo que preocupa a los profesores».
El representante de Vox ha mostrado su temor por la «islamización de las aulas con dinero público, para que luego (los menores) aprendan en las mezquitas cómo pegar a las mujeres sin dejarles marcas o cómo discriminar al colectivo LGTBI, y todo ello en contra de nuestra civilización y nuestra cultura».
Los docentes, según Rodríguez, están «muy preocupados» porque impartir esta clase no favorece «para nada la integración» de los inmigrantes en la sociedad balear.