La Conselleria de Salud aplaude las medidas –prohibición de fumar en la calle si no se guarda la distancia, límites a los encuentros sociales y multas contra el botellón entre otras–, anunciadas este viernes por el ministro Salvador Illa para tratar de frenar la ola de contagios que se ha ido expandiendo por el país las últimas semanas.
«Todas las comunidades autónomas compartíamos esta preocupación ante el aumento de contagios», señaló la consellera de Salud, Patricia Gómez. «Yo misma había transmitido al ministro que las medidas fueran compartidas por el conjunto del Estado porque consideramos que son más efectivas», señaló Gómez, que también valoró que afectarán por igual a los distintos territorios.
En relación a las medidas concretas, la consellera observó que algunas endurecen la normativa vigente en Balears, como ocurre con la obligatoriedad de cerrar los bares a la una de la madrugada como muy tarde (en las Islas se les permitía abrir hasta las 2, si bien las terrazas tenían que estar cerradas a la 1) o con el hecho de limitar a diez personas como máximo los encuentros sociales (aquí estaban permitidos grupos de hasta 15 personas en interiores y de 30 en exteriores); mientras que otras ya estaban en vigor, como ocurre con las multas al botellón o los cribados masivos en los barrios o núcleos donde la transmisibilidad del virus es muy elevada.
Gómez aseguró que el Ejecutivo balear está «totalmente alineado» con el Gobierno. «Considero que lo que hoy (por el viernes) se ha anunciado era necesario: había que reducir los contactos en el entorno familiar y tratar de frenar la movilidad de las personas», afirmó.
La Conselleria de Salut tenía previsto anunciar el próximo lunes nuevas medidas para esta comunidad. Gómez señaló que algunas de las anunciadas este viernes por Salvador Illa «son casi iguales» a las que se habían previsto desde aquí, de manera que «habrá pocos cambios» en la futura resolución del Govern. No obstante, «puede que se incorpore alguna más a la cual el ministro no se ha referido», añadió.