Los estrictos requisitos que marca la Ley de Subvenciones amenazan con dejar sin las ayudas del Consell a miles de empresarios del comercio y de la restauración en el momento en que más las necesitan. Todos los solicitantes de las ayudas deben estar al corriente de pago de impuestos con las distintas administraciones, algo que no cumplen la mitad de los posibles beneficiarios, según advierte el presidente de Pimeco, Antoni Fuster.
El pasado mes de diciembre se pusieron al cobro los pagos de IVA, IRPF y Seguridad Social, pero muchos de los pequeños empresarios que arrastran problemas económicos desde que estalló la pandemia no están al corriente de estas obligaciones tributarias porque el coronavirus les ha dejado sin ingresos.
«Si no cambian la Ley de Subvenciones, la mitad de los empresarios no podrá acceder a las ayudas porque no han podido hacer estos pagos», señala.
Al corriente de pago
En el Consell de Mallorca, la entidad que paga, reconocen que la ley estipula que solo pueden recibir subvenciones quienes están al corriente de pago, lo que puede crear problemas a pequeños empresarios que en los últimos meses han dejado de pagar cuotas a la Seguridad Social.
Cuando realizan la solicitud de ayudas, los empresarios deben firmar una declaración responsable en la que garantizan que están al corriente de pago con las administraciones. Pero si firman la declaración y en ese momento sí tienen deudas, pueden incurrir en falsedad documental, por lo que muchas gestorías se niegan a solicitar las ayudas en nombre de sus representados.
El Consell señala que este problema burocrático se puede solventar si el empresario acredita que ha pedido un aplazamiento o un fraccionamiento de la deuda. Coloquialmente, se entendería como una renegociación de esa deuda, lo que le permitiría firmar la declaración responsable sin que ello ocasiones problemas legales.
Al corriente de pago
Desde el Consell de Mallorca insisten en que previamente debe hacer ese trámite que acredita que se ha solicitado el fraccionamiento o el aplazamiento de la deuda. De esta forma, asegura que se podrá conceder la subvención para verificar después que toda la documentación es correcta, incluida la petición de aplazamiento.
El PI también alerta de los problemas que pueden tener los empresarios para recibir las ayuda y por eso ha presentado una propuesta en el Parlament para pedir el Gobierno que modifique la Ley de Subvenciones de forma que se exija a los empresarios estar al corriente de pago de las obligaciones tributarias, pero con anterioridad al 14 de marzo, fecha en la que se decretó el estado de alarma. «Si no se incluye esta salvedad, las ayudas no servirán para quienes tienen los problemas», asegura Josep Melià.