Balears se cerrará perimetralmente a partir del próximo viernes, pero permitirá los viajes entre Islas durante la Semana Santa. Así lo ha acordado la presidenta del Govern, Francina Armengol, con la Mesa de Diálogo Social este martes por la tarde. La medida estará en vigor hasta el 11 de abril incluido.
Con el cierre perimetral, será necesario acreditar un motivo de causa mayor o trabajo para entrar y salir de la comunidad autónoma. Sin embargo, sí se podrá viajar entre Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera.
Con esta nueva medida, será necesario acreditar un motivo de causa mayor o trabajo para entrar y salir de la comunidad autónoma.
Esta decisión significa dar marcha atrás respecto a lo que tenía previsto por la mañana: impedir los viajes de ocio entre las Islas.
Aunque el cierre por islas estaba sobre la mesa, la presión de los agentes sociales y de los Consells ha hecho que finalmente se decida que la movilidad se restringirá en el archipiélago en su conjunto.
«Estamos en un momento de incremento de contagios como cuando comenzó la segunda ola», ha advertido la consellera de Salut, Patricia Gómez, tras la reunión. «Hay que aprender de las experiencias anteriores. Hay que hacer un esfuerzo solidario y reducir la movilidad entre todos», ha explicado.
La consellera ha informado de que los residentes baleares que viajen entre islas durante la Semana Santa tendrán a su disposición tests de antígenos gratuitos a su regreso, prueba que se tendrán que realizar si han estado de viaje más de 72 horas.
Entre las medidas justificadas para entrar a Balears desde la Península está la asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios; cumplimiento de obligaciones laborales, profesionales o empresariales; la asistencia a centros docentes y educativos; el regreso al lugar de residencia habitual o familiar; la asistencia y cuidado de gente mayor, personas menores, dependientes, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables; los desplazamientos a entidades financieras y de seguros; las actuaciones requeridas o urgentes ante los órganos públicos, judiciales o notariales; las renovaciones de permisos y documentación oficial, así como otros trámites administrativos inaplazables y para hacer exámenes o pruebas oficiales inaplazables.