Llenar el depósito de combustible en Balears cuesta unos diez euros más que hace un año, según la información que aparece publicada en la página web del Ministerio para la Transición Ecológica. La escalada de precios comenzó el pasado mes de noviembre.
En el caso de la gasolina, el incremento ha sido del 18,52 % en el último año. En concreto, el 1 de enero de 2020 el precio del litro era de 1,204 euros, mientras que el pasado 31 de mayo ascendía hasta los 1,427. El presidente de la Asociación de Estaciones de Servicios de Baleares, Jesús Salas, señala que llenar el depósito cuesta unos 61 euros de media, es decir, unos 11 euros más que hace un año.
En el caso del diesel, el encarecimiento ha sido del 16,77 %. El 1 de junio de 2020 el litro estaba a 1,109 y el 31 de mayo de 2021 a 1,295. Llenar el depósito cuesta de media unos 58 euros; casi 10 euros más que hace doce meses.
A estos incrementos de costes hay que sumarle que el precio del combustible ya es más caro en Baleares que en la Península, debido al coste de la insularidad. A nivel nacional el coste del litro de gasolina es de 1,341 el litro (el incremento es del 9,3 % en un año) y en Baleares de 1,427 euros; mientras que el del diesel es de 1,203 (aumento del 17,25 %) y en las Islas de 1,295.
Salas quiere dejar claro que las estaciones de servicios no son las responsables del precio del combustible. Además, asegura que para ellos es más beneficioso que esté bajo porque así los clientes son menos reticentes a la hora de consumir. «La subida del precio de los carburantes es un tema de geopolítica», sostiene.
Pérdidas de entre el 75 y el 50 % en el confinamiento
El presidente de la asociación de estaciones de servicio explica que la pandemia les ha provocado pérdidas económicas muy importantes. Durante el confinamiento llegaron al 75 % en algunas estaciones de carretera y de entre el 50-60 % las de ciudad. En este sentido, argumenta que tenían la obligación de permanecer abiertos y prestar servicios mínimos del 65 %, aunque no tuviesen prácticamente clientes.
Además, denuncia que han quedado excluidos de las ayudas económicas aprobadas por las diferentes instituciones para hacer frente a las pérdidas derivadas de la pandemia.
Salas añade que las estaciones de servicio low cost y los coches eléctricos, entre otros, también están mermando sus ingresos. Por ello, ven difícil llegar a los niveles económicos prepandémicos.
Encarecimiento de los billetes de avión
El economista Pau Monserrat explica que la subida del precio del combustible tendrá una repercusión económica, ya que incide directamente en los precios. En el caso concreto de la economía de las Islas, por su dependencia del turismo, puede tener una incidencia mayor ya que podría producirse un encarecimiento de los billetes de avión. En este sentido, explica que las compañías aéreas están atravesando muchas dificultades económicas y señala que podrían repercutir el incremento de los costes de los viajes en el precio de los billetes de avión.
Monserrat señala que las subidas del precio del crudo repercuten de forma muy rápida en el de venta de los combustibles, pero bajan mucho más despacio.