Marga Prohens asegura que el hecho de que su pareja también sea un alto cargo político, el teniente de alcalde de Cort, Javier Bonet, complica la conciliación, pero señala que muchas parejas afrontan este problema como ellos. «Hay que hacer obras de ingeniería para conciliar, pero lo hacemos con equilibrio».
En cualquier caso, cree que ser presidenta, mujer y tener dos niños pequeños supone una responsabilidad, sin querer ser ejemplo de nada. «Es la demostración de que es posible; las mujeres de mi generación no debemos renunciar a nada y debemos poder estar al frente de cargos de responsabilidad sin dejar a un lado la educación de nuestros hijos ni delegar su crianza durante la próximos cuatro años», señala.
Afirma que tiene claro que debe seguir haciendo políticas de igualdad en el Govern e insiste en que, en esta materia, no habrá ni un milímetro de retroceso.