El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, tendrá que dejar su cargo en la Cámara en aplicación del reglamento. Es algo que ya le ocurrió en el pasado con la ‘podemita' Xelo Huertas en enero de 2017, semanas después de ser expulsada de su grupo.
Le Senne pasará a tener la condición de diputado no adscrito. Así se lo ha comunicado este lunes la portavoz del grupo parlamentario de Vox, Idoia Ribas, a la mesa del Parlament.
El escrito registrado por Vox informa de una reunión mantenida en el edificio de la Cámara a la que han sido convocados los siete diputados de Vox, pero solo han asistido cinco. Los reunidos (Idoia Ribas, Sergio Rodrígez, María José Verdú, Agustín Buades y Manuela Cañadas) han acordado por unanimidad la expulsión del grupo parlamentario del diputado Gabriel Le Senne. Afirman que la decisión se ha adoptado por unanimidad.
Ribas solicita a la mesa del Parlament que adopte de manera inmediata las medidas previstas para hacer efectiva la expulsión, pasando a tener la condición de diputado no adscrito «de conformidad con lo estipulado por el Reglamento del Parlamento». Por ese motivo, Ribas pide el cese de Le Senne en los puestos que ha ocupado en los diferentes órganos del Parlament, incluida la presidencia, dado que deja de pertenecer a su grupo parlamentario.
El cese de Xelo Huertas, es el precedente más reciente en la historia del Parlament balear. La 'podemita' fue cesada como presidenta de la cámara en enero de 2017, semanas después de que Podemos la expulsara del partido por una presunta infracción de su código ético. Entonces, el cese de Huertas fue respaldado por los juristas del Parlament que concluyeron en un informe que debía dejar el cargo «puesto que la norma que rige el funcionamiento de la Cámara establece que debe abandonar su puesto cualquier miembro de la Mesa apartado del grupo que le propuso».
Le han hecho un "Xelo Huertas", con la diferencia de que ésta estuvo en el cargo más de 580 días y Le Senne ha durado la friolera de... 143 días. Vamos a peor.