La dirección regional de Vox Baleares ha decidido cerrar filas en torno a Patricia de las Heras, actual presidenta de la formación, y Gabriel Le Senne, presidente del Parlament, y exteriorizar su «absoluta decepción» con la rebelión gestada por cinco diputados de la formación de Abascal en el Parlament.
Según fuentes consultadas por este diario, la maniobra que ha gestado el grupo que lidera Idoia Ribas se viene incubando desde hace tiempo y está motivada por la fuerte división dentro del propio grupo parlamentario. «Estos supuestos representantes de Vox en el Parlament, quedaron fuera del Govern. Una decisión que vino motivada por la fuerte división dentro del propio grupo parlamentario y los vetos de Sergio Rodríguez para que Jorge Campos ocupara la vicepresidencia del Govern», aseguró a este diario un destacado miembro del partido en Baleares.
Ante la falta de confianza, la dirección nacional de Vox rescató a Jorge Campos y lo designó candidato a diputado nacional por Baleares, y prefirió apostar por un acuerdo programático que recogiera las reivindicaciones de Vox.
«Ahora los diputados rebeldes han dinamitado el proyecto desde dentro, sabiendo que ninguno de ellos formaría parte de las listas en las elecciones de 2027, y controlando la asignación económica como Grupo Parlamentario», valoró la misma fuente.
Dentro de la cúpula de Vox en las Islas se está especulando con la posibilidad de que los disputados díscolos estarían barajando desde hace meses la creación de otro partido al que se sumaría Joaquín Rabasco, con quien Sergio Rodríguez guarda relación desde su turbulenta etapa como regidor en el Ajuntament de Llucmajor.