Los dos sectores de Vox en Baleares –y que están alineados con otros tantos del partido en clave estatal– coinciden en un punto: que tiene que cambiar la dirección balear, concretamente el comité provincial, que es su denominación oficial. Es lo que ha recogido este periódico tanto en declaraciones públicas como en comentarios hechos para no ser citados entre comillas.
Gabriel Le Senne, presidente del Parlament, habló este viernes de «ajustes», pero desde la mayoría del grupo parlamentario que lidera Idoia Ribas, y mayoritariamente crítico con la dirección de Abascal y con su relación con Baleares, se va más allá: busca el relevo total, también de la presidencia, y así se lo indicaron el jueves a dos representantes de Santiago Abascal que estuvieron en Palma para cerrar la crisis.
La reunión se celebró el jueves (y de ahí salió el comunicado en el que se indicaba que «las dos partes han solucionado distintos malos entendidos»), aunque la delegación había llegado el día anterior y mantuvo contactos con el otro sector de Vox pero también con el PP.
Lo que planteó el sector crítico a cambio de la paz –o de «la tregua», según otra expresión que se utiliza– es otra relación con Bambú [en referencia a la calle de Madrid donde Vox tiene su sede] y una renovación de la dirección de las Islas que pase por la presidencia del partido. Patricia de las Heras es ahora la presidenta y, aunque alineada con Le Senne, sus denuncias públicas sobre episodios del pasado, y que Jorge Campos llevó ayer a los tribunales, no tienen el apoyo de todo el sector afín a la estrategia nacional de Vox.
Abascal: «Fue un error»
Ni el sector crítico –que este viernes difundió unas declaraciones de Idoia Ribas sobre el fin de la crisis– ni el que se identifica con el presidente del Parlament quieren aportar nombres. Pero hay uno que se cita especialmente como posible alternativa a Patricia de las Heras: el del ‘número dos' de su actual estructura y vicepresidente del Consell de Mallorca, Pedro Bestard. Fue el único cargo institucional que no estuvo el martes pasado en el Parlament cuando otros dirigentes críticos con el grupo de los cinco, acudieron en bloque a apoyar a Le Senne y De las Heras.
La estrategia de Vox en el Consell de Mallorca es idéntica a la de comunidades autónomas donde el partido ultra participa en sus gobiernos. El presidente de Vox, Santiago Abascal, se refirió este viernes a la crisis. «Se trata de un error que cometieron unos compañeros y que ha sido subsanado», dijo durante su participación en un acto político de las elecciones gallegas.