El Govern pondrá en marcha un programa de alquiler similar al de una agencia inmobiliaria pública para tratar de sacar al mercado parte de las 100.000 viviendas vacías que hay en Baleares, según las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística. La Administración tratará de captar estas viviendas con dos medidas: garantizará el pago del alquiler a los propietarios a precios de mercado y garantizará la devolución del piso en las mismas condiciones en las que se incorporó al programa.
Los pisos que se consigan con este programa llamado de Alquiler Seguro se arrendarán a precios más bajos a jóvenes o familias de clase media que no pueden pagar los precios de mercado. El precio que se pague y que se cobre dependerá de la realidad de cada municipio. En estos momentos hay un programa de ayudas al alquiler que se paga a los arrendatarios, que también se mantendrá.
Se espera que la consellera d'Habitatge, Marta Vidal, dé más detalles de este plan en una comparecencia en el Parlament, pero en principio lo que se pretende es movilizar esos pisos que no se alquilan porque sus propietarios temen impagos de morosos y que los pisos terminen okupados.
La consellera lleva meses trabajando en perfilar los detalles de este plan, al que no se podrán acoger todos los propietarios. Por ejemplo, el Govern no intermediará cuando se trata de inmuebles de grandes tenedores, de bancos o de fondos de inversión. Los pisos deberán estar vacíos desde al menos seis meses, tendrán que estar en buen estado para poder alquilarse de inmediato y deberán ser viviendas usadas con un mínimo de tres años de antigüedad.
El plan en el que trabaja el Govern es que el abono a los propietarios se realice a través de agentes inmobiliarios o administradores de fincas, con lo que se prevé firmar convenios para la realización de este programa de vivienda en alquiler.
El Govern también prevé poner condiciones a los propietarios ya que no todos se podrán beneficiar del programa, pero también quienes los alquilen deberán cumplir una serie de requisitos relativos a los niveles de renta. Las viviendas deberán destinarse al alquiler habitual y permanente, los que excluye la posibilidad de que se destine a otros usos, como el del alquiler turístico. Tendrán que comprometerse a devolver el piso en las mismas condiciones en las que se lo entregó el Govern.
El Ejecutivo cree que estas garantías que ofrece el Govern a los propietarios, el pago asegurado y la devolución del inmueble en las mismas condiciones, hará que muchos de ellos se decidan finalmente a alquilar. La Conselleria de Vidal considera que esta medida puede ayudar a aumentar el parque de vivienda útil de manera rápida.