El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha convocado a Marga Prohens y al resto de líderes autonómicos de la formación a una reunión la primera semana de septiembre para tratar de consensuar una propuesta de financiación. No será fácil ya que los intereses de las comunidades autónomas son divergentes, pero algo tienen en común todas ellas: la exigencia de que el modelo se negocie en un marco común y de que no haya un acuerdo bilateral como el que se ha anunciado con Catalunya.
El equipo de Prohens prepara una propuesta de mínimos que se entregará al resto de comunidades gobernadas por el PP con una serie de consideraciones esenciales. Una de ellas es el reconocimiento de la ordinalidad, para que las comunidades donde más dinero se recauda no se encuentren después a la cola en financiación, como ha sucedido con el modelo que está en vigor. En términos per cápita, Baleares es la segunda comunidad que más recauda, pero la novena en recibir recurso y el Govern quiere acortar esa diferencia.
La segunda gran exigencia del Govern de Prohens será que se respete al autonomía financiera de las comunidades autónomas, lo que significa que Baleares puede modular como quiera posibles bajadas o subidas de impuestos. Otra pata de las propuesta de Balears será que se mejore el reconocimiento de la insularidad ya que la mayor parte de esta compensación se va a Canarias.
Hasta aquí, el modelo que planteará Marga Prohens coincide con el planteamiento que realizan otros presidentes del PP, como los de Madrid, Andalucía, Murcia y Valencia. A todos ellos les una, además, otra petición: compensar económicamente a las comunidades que ganan población y que, en consecuencia, tienen que construir colegios, hospitales, depuradoras, residencias sociales y demás infraestructuras.
Es aquí donde surgen las discrepancias con el resto de presidentes del PP porque Galicia, Castilla y León, Cantabria, Aragón y Extremadura piden lo contrario: que se compense a la España que se vacía, que también debe prestar esos servicios en las zonas más despobladas de España y en territorios diseminados, lo que también supone un grave problema de financiación, según sus presidentes.
La propuesta que se consensúa de esta reunión será, muy probablemente, mucho más abierta que las propuestas concretas que pueda presentar cada comunidad autónoma. El PP quiere mostrar una idea de conjunto ya que será la que trasladen después los presidentes al Gobierno en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.