La Delegación del Gobierno en Baleares ha salido al paso de inmediato ante las exigencias que plantea Vox en sus negociaciones con el PP para dar el visto bueno a los Presupuestos que debe manejar el Govern para 2025. Y es que el Ejecutivo ha aceptado la propuesta de Vox para que se realicen pruebas médicas, concretamente «análisis dentales» para determinar la edad de los migrantes menores que llegan a las islas. Así lo han confirmado a Última Hora fuentes del Ejecutivo después de que la portavoz de la formación ultraconservadora, Manuela Cañadas, planteara esa iniciativa y el portavoz parlamentario de los populares, Sebastiá Sagreras, afirmara que la estudiaría.
De inmediato, desde la Delegación del Gobierno en Baleares han recordado que la aplicación de las técnicas médicas para determinar la minoría de edad de una persona migrante es un procedimiento que depende de la instrucción del Ministerio Fiscal, reservándose de manera única y exclusiva para los casos en los que se considere que es necesario certificar este dato y no existra otra vía documental para poder hacerlo.
De la misma manera, se recuerda que el protocolo contempla pruebas mínimamente invasivas y proporcionadas, que deberán respetar la integridad de la persona, como establece la normativa en materia de protección jurídica de los menores y, en ningún caso, se podrá imponer o exigir la realización de esas pruebas en contra de la voluntad del menor.
Por ello, el delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez Badal, la pedido a PP y Vox «que deben de utilizar a los menores no acompañados para asegurar o justificar apoyos políticos a los presupuestos; situar a estas personas en el centro del debate político pone en riesgo su dignidad, más aún cuando se trata de personas con un perfil social vulnerable que requieren de políticas y actuaciones solidarias por parte de los poderes públicos». Además, recalcó que el objetivo y la misión principal de las instituciones responsables de la tutela de estos menores no es otra que asegurar la protección de este colectivo vulnerable, cumpliendo con las competencias que le han sido asignadas.
EN PEPÊT GONELLABuenos días. Sr. En Pepêt Gonella, me da la impresiòn de que recibo un embate de usted, solamente por el hecho de que me interpreta ideologicamente con la derecha, idependientemmente de si pienso así o no. Para afianzar el ataque me encasilla como facha, después de haberme ya embestido tomando como punto un recurso léxico marinero. Miré caballero, a mí, su texto me parece muy en la línea en la que nunca se debiera debatir, como es atacar de forma personal al debatiente para después desde esa aparente altura conseguida atacar el argumenrario defendido por el oponente, independientemente de si lo argumentado por su adversario dialéctico tiene algún valor. Además, ha usado como herramienta la invención. Al definirme como "ignorante de la marina" hace una afirmación gratuita porque usted no sabe cual es, y si existe mi nivel de competencia marinera. No sabe sabe si soy un neófito en la materia o un licenciado en marina civil. No lo sabe. Sin embargo, parece seguir la máxima de "difama, que algo queda". Muy poco edificante me parece tener que empezar ha discrepar de esta forma. Al afirmar que yo creía que debatía con un zurdo, tampoco atina en absoluto. Yo no pretendía debatir, si no llamar la atención sobre la forma de debatir. El error que cometí fue pulsar el enlace de respuesta sobre el comentarista equivocado. Por ello solicito al comentarista interpelado equivocadamente ser perdonado por haber errado. El reproche que deseaba dirigir hacia otro comentarista consistía, no en el objeto de debate, si no en la forma de debatir. Un dato accesorio es que, el debatiente al que deseaba referirme, usa muy malos modos, ruines con la persona, todo para vencer, nada para convencer con argumentos, nunca usando el la razonamiento, nunca buscando puntos de encuentro desde los cuales se puedan poner sobre el tapete diferentes puntos de vista. Lo que yo suelo definir como un matón epistolar. En cuanto a mi "posición política", no tengo. Busco, comparo, y compro lo mejor que encuentro. Lo aprendí de Manuel Luque. Lo de llamarme facha es otra invención suya. Me pregunto cómo se atreve a insultarme, llamándome facha, si usted no me conoce. Me lo llama a mí, que he vivido la dictadura, que soy hijo cultural del mayo del 68, y que he corrido delante de los grises. Hoy, por primera vez, y espero que por última, voy a escribir un calificativo personal. Me parece usted, y digo me parece, un bocachancla. Tal vez no lo sea; y solamente sea un soldado de alguna militancia. De cualquier modo, algún motivo hay para defender cualquier ideología, sea de derechas o de izquierdas, sin espíritu crítico acerca de la propia idea. Me temo que para usted el fin que persigue justifica los medios que utiliza, y no le importa dejar daños colaterales por el camino. No tiene dudas; y a mí las personas que no dudan me dan miedo. Seria bueno para todos que replanteara su forma de debatir, si es eso lo que pretende. A mi me parce que no desea debatir, vencer e influir, sí; y a cualquier precio. Por último, no deja de ser curioso que de un mensaje respuesta hacia un tercer comentarista, y una segunda respuesta aclaratoria, usted tome vela en el entierro. ¿Verdad? ¿Cree usted en las casualidades? Yo sí, pero son tan escasas que no son mi primera opción. Le ruego me respete, y respete a los demás, al prójimo; sobre todo a aquel que piense distinto. ¿Por qué no empieza por preguntar antes de disparar? Hoy doy fe de que dispara con los ojos cerrados, no sabe a quien dispara, y lo hace con las palabras equivocadas. ¿Matonismo político, tal vez? Un saludo.