Tras la segunda derrota parlamentaria sufrida el martes por el boicot de Vox, el Govern está analizando jurídicamente cómo sacar adelante las medidas del decreto que no pudo aprobar en el pleno y que incluye políticas de calado, como la importación de residuos de Eivissa a Mallorca, una moratoria para construir parques fotovoltaicos en rústico y la aceleración de proyectos considerados estratégicos. Estas tres medidas quedan en el aire y sin capacidad de aplicación hasta nuevo aviso.
La caída del decreto del Govern por el boicot de Vox parecía que también iba a tumbar la declaración del proyecto del Centro Universitario Beato Luis Belda, adscrito a la Universidad San Pablo CEU, como proyecto de especial interés estratégico para la Comunitat. Sin embargo, desde la Conselleria d’Educació confirmaron a este diario que no tiene ningún efecto sobre esta medida que acelerará la tramitación para desarrollar el centro en el antiguo Riskal.
Al menos en este caso concreto, mientras se espera una convalidación parlamentaria, los decretos ya están en vigor y se dispone de 30 días para convalidarlos, según explicaron desde la Conselleria, destacando que por motivos de seguridad jurídica los actos administrativos son plenamente válidos.
El último choque PP-Vox, aleja aún más la posible aprobación de las cuentas para el año 2026. Si bien desde el Govern ya avisaron que no tenían problema en prorrogarlos.
Renunciar a la importación
Més exigió este miércoles al presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, que renuncie al proyecto de traer residuos de Eivissa por la falta de cobertura legal para llevarlo a cabo. La formación soberanista recuerda que ha solicitado en reiteradas ocasiones los informes y expedientes sobre esta operación y que, por ahora, no ha recibido ninguna respuesta. Consideran que será un retroceso ambiental en contra de la Isla.
Vale mas hacer un horno y en cada iusla y dejarse de hacer experimentos con gasolina.