«Estamos desesperados para encontrar trabajadores y hay 3.500 desempleados que demandan empleo en el sector de la construcción en Baleares», expresa la directora general de la Asociación de Constructores de Baleares, Sandra Verger. Por ello, reclama que se adopten medidas, ya que esto dificulta aún más el ya complicado acceso a la vivienda.
Verger calcula que en las Islas hacen falta unos 6.000 empleados en el sector de la construcción. En estos momentos, hay unos 61.000. Esta carencia de profesionales obliga a retrasar el inicio de algunas obras. En algunos casos, hay hasta un año de espera para poder comenzar una obra. No obstante, precisa que hay problemas más graves, como el escaso suelo disponible para edificar viviendas y el tiempo de espera para conceder las licencias.
Respecto a los oficios en los que tienen más problemas para encontrar personal, responde que todos, pero especialmente los de albañil, encargados de obra, encofrador y montador de prefabricados estructurales.
¿Por qué faltan tantos trabajadores?
La directora general de la Asociación de Constructores de Baleares explica que «la construcción ha experimentado el mismo proceso de envejecimiento poblacional que otros sectores, pero agravado por la crisis económica del 2008 que provocó en Baleares pasar de tener 70.000 trabajadores a la mitad, 35.000. Además, la edad media de los operarios ha aumentado por otros factores, como la redistribución de jóvenes a otros sectores durante la crisis económica y no han vuelto cuando el sector se ha recuperado. También por la emigración de jóvenes extranjeros a otros países distintos a España durante la crisis».
En relación a este asunto, subraya que «los datos que hemos podido recabar del Informe 2024 del Observatorio Industrial de la Construcción son contundentes: la edad media de los trabajadores del sector se sitúa en 45 años. Mientras que la población ocupada entre 30 y 54 años constituye la gran mayoría (67,9 %), los jóvenes menores de 30 años apenas representan un 10,3 % del total. Lo que es aún más revelador es la tendencia a largo plazo: en la última década, la presencia de jóvenes ha disminuido, mientras que la de los mayores de 55 años ha aumentado drásticamente, pasando de un 12,1 % en 2014 a un 21,9 % en la actualidad. Esta diferencia, que era de solo un punto porcentual hace diez años, hoy supera los once».
A su modo de ver, «esta brecha generacional tiene consecuencias directas y tangibles. Se estima que en los próximos 10 años cerca del 22 % de la fuerza laboral actual del sector se jubilará. Este dato, sumado a que más del 8,7 % de los ocupados mayores de 60 años saldrán del sector en solo 5 años, dibuja un panorama de inminente escasez».
Ante esta situación, sostiene que «tenemos que llegar a los jóvenes para que quieran venir a formarse en la Universidad de la Construcción, la Fundación laboral. En Baleares formamos cada año a más de 4.000 trabajadores y tenemos implantados los grados medio de FP en las tres Islas. Es necesaria la colaboración público-privada para atraer y formar a más gente. Las empresas demandan mano de obra cualificada y debemos asegurar el relevo generacional».
El elevado coste de la vida y, especialmente de la vivienda, es otro de los motivos por el que la falta de mano de obra en este sector es tan importante. «El sobrecoste de la insularidad y el grave problema de la emergencia habitacional son un hándicap importante para atraer trabajadores al Archipiélago balear», argumenta.
Incorporación de la mujer
En su opinión, otra de las claves pasa por la incorporación de la mujer al sector de la construcción; que actualmente sólo representa al 11,2 % de los trabajadores. «Debemos también ser un polo de atracción para la mujer como sector sin género. Su presencia en las empresas y en las obras, principalmente, es todavía minoritaria. Puedo decir con gran satisfacción que en la FP de Obras de Interior, Decoración y rehabilitación ya hay en Mallorca más chicas que chicos. Los procesos constructivos están cambiando y cada vez está más presente la tecnología, la innovación y ya no se requiere tanto esfuerzo físico», expresa.
En este sentido, sostiene que «es necesaria una colaboración directa con el SOIB para recualificar e incentivar la incorporación de personas trabajadoras de aquí por las dificultades de traer gente de fuera por el problema de la vivienda».
"Estamos desesperados para encontrar trabajadores y hay 3.500 parados en este sector" Yo le contestaría: "Estamos desesperados por encontrar vivienda de alquiler por menos de 1200 euros y hay 3.500 viviendas en alquiler en Mallorca" Queréis trabajadores por 1500 euros y los trabajadores quieren alquileres por 500. Cada uno mira por lo sus familias, no te enfades porque no miren por la tuya. Quizá deberías trabajar más tú.