Los 100.000 funcionarios de las administraciones central, autonómica y local verán cómo sube su sueldo un 11 % en los próximos cuatro años tras el acuerdo alcanzado finalmente entre el Gobierno central y los sindicatos en una reunión que permitió romper la situación de bloqueo a la que se llegó en una reunión el pasado lunes.
El principal escollo hasta ahora era el porcentaje de subida de este año ya que el Gobierno ofrecía un 4 %, algo que para CCOO y CSIF era insuficiente. Finalmente se ha cerrado un pacto que permitirá descongelar el sueldo de los trabajadores públicos, que permanece estático desde el pasado mes de enero a la espera del acuerdo cerrado ayer. La subida será de un 2,5 % este año y un 1,5 % a partir del próximo mes de enero, con un 0,5 % añadido si el IPC supera el 1,5 %.
El pacto incluye además el compromiso de que el Gobierno subirá el plus por residencia que cobran los funcionarios del Estado y lo equiparará con el que cobran en Canarias, que es de 206 euros para las categorías más altas frente a los 110,56 que cobran ahora los de Mallorca. En Menorca y Eivissa el plus máximimo llegará a 410,6 euros para los funcionarios de mayor nivel.
Esta subida de los complementos por residencia afectarán a unos 7.500 trabajadores públicos de Administración central, además de otros 12.000 que trabajan para las administraciones locales. Ahora deberá decidirse en una mesa específica cómo se aplica esta equiparación salarial y si se hará con un mismo plus para todos los niveles o serán pluses diferentes en función de las categorías. En cualquier caso, la equiparación se hará a partir del año que viene.
UGT ya había dado su visto bueno a la subida del 11 % en cuatro años, pero desde CCOO y el CSIF la postura no estaba tan clara. El secretario general de UGT Servicios Públicos en Baleares, Miguel Ángel Romero ya había asegurado la semana pasada que el acuerdo de equiparación de los sueldos, incluido en el acuerdo general, era un hecho «histórico» para los trabajadores público.
Sin embargo, el acuerdo no fue posible el pasado lunes porque CCOO quería incorporar otras cuestiones al pacto general. El principal escollo se encontraba en el porcentaje de subida salarial que el Ejecutivo ofrecía para este año 2025 ( un 2,5 % con efectos retroactivos desde enero) y para 2026, que sería de un 4%, algo que desde el sindicato veían insuficiente.
A pesar de estas diferencias, CCOO decidió continuar en la negociación «por responsabilidad» y porque cree en que hay margen para lograr un punto de encuentro, según aseguraba en un comunicado. En cualquier caso, en un comunicado, este sindicato ya anunció que no descartaba ningún escenario si persistía el «inmovilismo» por parte del Gobierno. Sobre la mesa estaba la idea de retomar las movilizaciones e incluso convocar una huelga en todo el ámbito público.
O sea que de cada 10 habitantes 1 es funcionario?.