Baleares ha batido este año su récord de tormentas severas, con un total de 11, superando las 9 de 2022 y casi triplicando la media anual de los últimos años, que es de 4.
Son datos aportados por el meteorólogo Duncan Wingen, quien ya elaboró junto a Agustí Jansà el estudio Climatología de tormentas severas en Baleares (original en inglés), que identificó 43 tormentas extremas entre 2010 y 2023. Según Wingen, «teníamos un récord de tormentas severas en 2022, con un total de 9. Parecía difícil de superar. Lo ha hecho 2025, incrementando la media anual».
Se consideran tormentas severas aquellas que presentan rachas de viento superiores a 90 kilómetros por hora, piedras de granizo de 2 o más centímetros y la irrupción de tornados en tierra.
Wingen atribuye el elevado número de tormentas severas en 2022 y 2025 «a que fueron años muy cálidos, con olas de calor marinas y temperaturas de la superficie del mar superiores a los 30 grados desde junio. Hay una relación directísima entre la formación de tormentas severas con la temperatura del mar. A partir de los 20 grados en la superficie del mar, ya se puede formar una tormenta severa según cuál sea la dinámica atmosférica».
En opinión del meteorólogo, «este tipo de tormentas va a más. Es previsible que su temporada sea más larga, con fenómenos más violentos y recurrentes, y se están acentuando. La relación directa con la temperatura del mar supone a su vez una relación directa con el cambio climático, que no crea nada nuevo, pero lo intensifica todo. En este sentido, podríamos decir que el clima está dopado. Podemos asistir a tormentas realmente importantes en los próximos años, pues el Mediterráneo se está calentando más rápido que el resto de mares y océanos. Y lo que antes era una época de tormentas extremas reducida a finales de verano y principios de otoño se está convirtiendo en una temporada de cuatro meses de duración».
Asimismo, Duncan Wingen explica que «a nivel estatal, las comunidades con más tormentas severas son Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares por estar cerca de un mar cálido y sus especiales condiciones orográficas».
El norte de Mallorca ha superado al sur en incidencia de estos episodios extremos y el otoño sigue siendo la estación en la que más se producen, aunque ha bajado en favor de la primavera. Si contabilizamos las tormentas severas por meses, se da un empate técnico entre agosto, septiembre y octubre.
En 2025 se han registrado 6 días de granizo y tres días de tornados en tierra, dos de ellos en Palma con vientos lineales que, el 9 de septiembre, superaron los 140 kilómetros por hora.
Siempre hay un tonto dispuesto a decir lo que les conviene a los politicos. Agenda 2030.