Largo desplazamiento el que emprendió ayer el Menorca Bàsquet hacia las Islas Afortunadas para enfrentarse este mediodía al Gran Canaria 2014 en la séptima jornada de la Liga ACB. Quizás la de hoy sea una ocasión propicia para hacer posible lo que ha resultado imposible en las ocho ocasiones en las que ambos equipos se han enfrentado en la máxima categoría del baloncesto español.
El Menorca acude con la tranquilidad que le proporciona cualquier lectura de la clasificación en curso. En la decimosegunda plaza y con tres fantásticas victorias en su haber, tras el triunfo del pasado domingo frente al CB Granada, no existe presión añadida. Es por ello que puede ser esta la mejor oportunidad para quebrar esta estadística tan desfavorable y noquear por primera vez al conjunto canario. De hecho, en su última visita a Las Palmas, el Menorca ya tuvo la opción de conseguirlo pero entonces Bazdaric pifió la última posesión de su equipo.
El Gran Canaria es un equipo muy fiable en su pista donde pierde muy pocos partidos al calor de su afición que este año, de momento, no llena la coqueta cancha del Centro Insular de Deportes.
El estado de forma de Diego Ciorciari, la progresión en el juego que experimenta Donaldson, el lento despertar de Radenovic y la regularidad de Victor son buenos argumentos para pelear por el botín en juego, pero no bastará para adelantar a los canarios si no arranca de una vez Limonad y el banquillo deja atrás las valoraciones negativas de la pasada jornada.
Paco Olmos ha preparado a conciencia el partido para plantear batalla al conjunto de Pedro Martínez, uno de los grandes técnicos de este campeonato que quiere llevar, un año más, al Gran Canaria tanto al play off como a la Copa y a la final four de la Eurocup. Por ello los grancanarios cuentan con el triunfo de este mediodía por más que respeten al rival menorquinista. Con un buen juego interior en el que destacan el incombustible Savané y Wallace, y la referencia exterior de Carroll, el máximo anotador de la Liga, el Gran Canaria quiere lograr sus metas.