El Club Bàsquet Ferreries se ha renovado por completo. La entidad azulgrana apuesta esta temporada por complementar la educación deportiva, que dan a los cerca de 100 jugadores con los que cuenta, con la formación escolar, es decir, con un proyecto en el que los propios técnicos del club realizan un plan de estudios para sus jugadores que deben cumplir para poder entrenar. Además, también ha creado dos grupos de gimnasia pasiva para la gente del pueblo y cuentan con más proyectos en mente. Toda esta revolución llega de la mano del nuevo director técnico, Gaspar Roura, que el pasado verano cambió los despachos del Menorca Bàsquet por los del CB Ferreries. "El objetivo de todo esto es formar personas a partir de la mayor influencia que suelen tener los entrenadores sobre los adolescentes que los propios padres", afirma el catalán, tremendamente ilusionado con el nuevo proyecto que se le ha abierto.
Para Roura es muy importante el 'coaching', un método que "trabaja la confianza a partir del análisis individual de cada jugador para ver en qué puede crecer rápidamente y desarrollar esta faceta".
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