El Arenys Bàsquet puso el punto final a la relación victoriosa del Made in Menorca con Ses Canaletes tras vencer este domingo por 81-82 en un encuentro con alternativas, exiguas ventajas por bando y en el que la supremacía en el rebote ofensivo del conjunto de César Saura (21 capturas) fue el gran condicionante para los de Martínez Escalas que, además, se vieron privados del concurso de Jan Orfila –tercera falta en el primer minuto del segundo cuarto– castigado con rigurosidad por la pareja arbitral.
El Arenys, muy físico, labró su triunfo en ese dominio bajo aro local, la dirección de Pau Ruzafa (10 asistencias y 9 faltas sufridas) y el acierto desde el perímetro de Aritz Tomàs (6 triples sobre 11 intentos). El partido llegó muy equilibrado a su epílogo tras dos tiros libres de Jan y una canasta de Pitu (78-78 a 50 segundos) pero la lectura final del Made in Menorca no fue la correcta, quizás motivado por la falta de frescura a la que aducía el técnico en el análisis posterior del encuentro, y por su defensa pues solo acumulaba una falta en ese minuto final.