Servigroup Benidorm, CB Cazorla Jaen Paraíso y H.A. Zornotza. Son, por orden cronológico, los rivales con los que rivalizará el Bàsquet Menorca, de viernes a domingo, en el marco de la fase final por el ascenso a LEB Plata que acoge el Pavelló de Bintaufa. Tres conjuntos, tres estilos y un denominador en común, en el caso compartido con el anfitrión insular; ganar e ingresar en el tercer nivel del baloncesto estatal.
Servigroup Benidorm
Proveniente de la conferencia E, el cuadro alicantino será el primer rival del Bàsquet Menorca (viernes, 20.30 horas). A priori, se trata del adversario más débil, lo cual siempre se distingue un arma de doble filo. Fundado en 1982, el Benidorm es una entidad de clara querencia por la cantera cuyo primer equipo jamás ha rebasado el límite de la Liga EBA. Disputa la fase de ascenso a LEB Plata por segunda ocasión en su historia. En cuanto a la plantilla, destacó el 'corte' de Darren Payen en marzo, reemplazado por Spenser Mitchell (12.6 puntos y 8.6 rebotes de promedio desde su incorporación), un 2.08 con bagaje en el baloncesto universitario estadounidense que resulta referente en la zona. El exalero del Menorca Bàsquet Paco Solsona (integró la plantilla 2008/09 como vinculado) y el también exterior, el mallorquín Jaume Vallés (un auténtico jornalero del baloncesto), son otros rostros conocidos de un equipo que llega al baile por el ascenso 'de Plata' como 'cenicienta' y sueña con marchar, no como 'príncipe' sino como auténtico rey.
CB Cazorla Jaén Paraíso Interior
La confección del calendario de la cita ha dejado para la tarde del sábado (18.30 horas) el rival teóricamente más duro y exigente. Quizá el duelo cumbre. La presencia en sus filas de numerosos jugadores de color ampara en el Cazorla una propuesta de juego atlética y veloz, en ocasiones muy eficaz por encima del aro y con resortes de amenaza en casi todos los espacios de la pista. Dirigido por el exalero Francis Sánchez, un clásico LEB –sustituyó en enero a Jesús Gutiérrez–, la pasión que este siempre evocó por el juego ha sabido transmitirla a un grupo que se ha instalado en la elite del nivel EBA en el reciente bienio. Y la gran aspiración de los jienenses es convertirse en el primer proyecto de su provincia en militar en LEB 2. El base Jalen Riley (21 puntos de media), y los exteriores Quarry Greenaway (20) y Steven Weidlich (15), son algunos de los argumentos del Cazorla, que el pasado año fracasó en la fase de ascenso ejerciendo de anfitrión (La Roda, su ejecutor). Restañar esa herida incrementa si cabe la motivación de uno de los claros candidatos a triunfar en la Isla.
H.A. Zornotza
Surgido en 1959, el rival con el que el Bàsquet Menorca cerrará la liguilla (domingo, 13 horas) se significa como un clásico del siempre pródigo basket vizcaíno. Expulsado el pasado año de LEB Plata por causas burocráticas –a las pocas semanas de pugnar la final por el ascenso a LEB Oro–, el Zornotza, un bloque de muy evidente vocación perimetral, no ha disimulado en toda la temporada que su objetivo es rescatar la plaza de 'Plata' con celeridad. Richaud Pack, escolta americano que firma 20 puntos por encuentro, brilla como faro anotador de un equipo que solo cedió dos derrotas en 30 partidos de Regular y que se mostró sólido y hegemónico en la Final Four de Gijón para certificar su lugar en la fase final de Maó.