El Hestia Menorca se mide en la tarde-noche de hoy en Maó al Cornellà, en partido correspondiente a la jornada 24 del ya finalizado segmento Este de LEB Plata (Pavelló Menorca, 19 horas), duelo aplazado en su momento a causa de un positivo por coronavirus detectado en las filas del equipo catalán, y último que resta por disputar por tanto dentro de un grupo en el que el equipo que entrena Javi Zamora tiene garantizado el tercer lugar, independientemente del resultado que arroje la cita (por contra, hasta seis encuentros, incluyendo el de anoche entre Zornotza y Juaristi, faltan para completar el calendario de la conferencia Oeste, lo que además afecta de modo directo al conjunto menorquín, puesto que de la resolución de los mismos depende tener uno u otro rival en la primera ronda de los playoffs).
Pero el cuadro insular, antes de irrumpir en las eliminatorias por el ascenso a LEB Oro –en lo que el club se estrena, y que empezará contra Círculo Gijón, Zamora o, muy improbablemente, con el Melilla Sport Enrique Soler– y al margen de que no pueda alterar –para mejorar– su situación en la clasificación de la Regular, sí debe tratar de suscribir el que sería su décimo séptimo triunfo de la temporada, tanto por su impacto en lo anímico, como por su posible importancia más adelante, en la segunda eliminatoria de la fase por el ascenso, de conseguir acceder a esta obviamente.
No en vano, en el criterio establecido por la FEB para ordenar y emparejar entre sí a los siete equipos que sobrevivan a los octavos de final y al proveniente del cruce entre líderes por el ascenso directo –que será el ‘cabeza de serie’ en los cuartos– prevalecerán la clasificación y el número de victorias conseguido durante la Regular, de ahí la trascendencia que le es implícita al partido desde el rigor aritmético.