Más de 30 años después, Joan Postius se reencontró con el grueso de los que fueron sus compañeros a finales de los 70 e inicios de los 80 en el Club Bàsquet Boscos, en la llamada época dorada del baloncesto del histórico club de Calós. Postius tres largas décadas después ha vuelto a Ciutadella, donde jugó seis temporadas e incluso de donde son sus dos hijos y su mujer.
Y estos pasados días volvió a verse, cómo no en Calós, con parte de los jugadores que formaban aquel temible Boscos: los hermanos José y Mión Mercadal, Tino Sarris, Toni Mascaró, Josú Luis Faner, Guiem Anglada, Fel Cortès, Toni Català y el entrenador Bep Marquès. Tan solo faltó algún jugador por temas personales y los que tristemente ya han fallecido. «La verdad es que fue muy emotivo para mí este reencuentro y además en Calós, 32 años después de marchar de Ciutadella», señalaba este viernes Postius, todavía en la Isla, antes de regresar a Girona, donde reside y vive su feliz jubilación.
A instancias de Lorenzo Alocén
Con un ‘article salat' prácticamente perfecto, el que fuera notable pívot catalán del CB Boscos, recordaba estos días en Menorca su pasado gualdo. «Fiché en Boscos procedente del CB Granollers de Segunda, con el que acabábamos de ascender a Primera División. Fue a instancias de mi mentor deportivo, el recordado Lorenzo Alocén, que me dijo que debía fichar en Ciutadella y no lo dudé ni un instante», recordaba Postius, con Jaume Gelabert de presidente primero y Àngel Genestar después, al que también ha visitado estos días, «en un baño mutuo de emoción, ya que le debo mucho a Àngel».