El Hestia Menorca regresa este martes (20.30 h) a Bintalfa en el marco de los dieciseisavos de final de la Copa España con la necesidad de reaccionar tras dos derrotas dolorosas ante dos de los equipos más en forma de la liga y, por ende, candidatos al ascenso a ACB: Leyma Coruña y Súper Agropal Palencia. El reto se presume complicado al ser el rival, de nuevo, el conjunto herculino, el cual ya asaltó el Pavelló Menorca diez días atrás.
El primer paso es recuperarse cuanto antes del traspié del pasado viernes en Palencia, el cual dejó «muchas cosas que analizar», según indicaba Javi Zamora al término del encuentro. «Tenemos la sensación de que hemos luchado, trabajado, bajado al barro, y aún así nos han anotado 89 puntos. Hay que seguir construyendo y trabajando. Esto es muy largo y mientras los chicos pongan corazón en la pista, no se dejen llevar y sigan creyendo, vamos por el buen camino», consideraba el técnico sobre la actuación de los suyos en Castilla y León.
Posibles bajas y el control del rebote
Los menorquines acuden al cruce de Copa, en principio, con la duda por molestias físicas de Jaume Lobo, que tan solo pudo participar cinco minutos en la última jornada, y con la incertidumbre de Fynn Schott, quien continúa recuperándose de la virasis que le dejó fuera de combate en Palencia, donde su entrenador reconocía que le había echado de menos. «Sobre todo para tener una rotación más. Fynn es un tío que con esa presencia física y esa juventud, además de que le pone muchísima energía, rebotea muy bien. De hecho, en el segundo cuarto, el rebote ha sido una de las claves», apuntaba el técnico del Hestia en referencia al choque en tierras palentinas.
Esa batalla del rebote es en la que deben volver a hacerse fuertes los insulares si quieren tener opciones ante Coruña, que ya se la adjudicó con suficiencia en el choque liguero. «Hay que intentar controlar el rebote. Estuvimos bien durante 20 minutos, pero en la segunda parte perdimos esa batalla ampliamente. Cuando a un equipo como Coruña le concedes segundas opciones e incluso una situación de tiros liberados en transición defensiva, pues son muy difíciles de parar», recuerda sobre el encuentro de hace diez días.
Formato atractivo
Para mantenerse más entero y luchar con garantías hasta el final, Javi Zamora considera que el foco debe estar «en defensa, en intentar tener ese espíritu competitivo atrás y crecer desde ahí». Una victoria, además de suponer una inyección de moral, tendría como premio avanzar a los octavos de final de una competición que presenta un formato innovador y una dotación de 50.000 para el campeón.
«Creo que la idea de la Copa España es interesantísima porque hay grandísimos proyectos en Segunda FEB y Tercera FEB. Es una competición que busca juntarnos a todos con nuestras diferentes realidades y que tiene todos los alicientes para ser un torneo atractivo. El formato de este año que habrá que analizarlo una vez finalizada la competición, pero a priori me parece ilusionante cuanto menos.
Bueno. Otro partido para los entrenadores que hay por aquí.