Si bien por momentos, a primera hora de la tarde de este viernes, desde la Penya Ciclista Ciutadella no podían garantizar la celebración de la Etapa Nocturna –la primera de la XVI Volta a Menorca BTT 2022–, finalmente, y después de reunirse con los servicios de emergencia de Menorca, se decidió dar la salida por la noche a la prueba, con el cielo siempre amenazante. Y es que las fuertes lluvias que cayeron la madrugada del jueves al viernes en la Isla dejaron maltrechas e inundadas algunas de las partes por las que debía pasar esta nocturna de una BTT, este año, con 508 participantes.
Puntuales, a las 21 horas, salieron los corredores de esta etapa embrionaria, valientes de la noche y con el suelo empapado. Hasta el punto que Pere Català, gerente de la Penya, confirmaba a «Es Diari» que, «en caso de fuerte tormenta esta noche (anterior), podría suspenderse la etapa. Una Nocturna que se hace con un recorrido modificado, evitando las zonas de posible peligro y con el compromiso de cancelar si las condiciones empeoran», aseguraba Català, minutos antes de darse la anhelada salida. La zona del Canal Salat y tramo entre Son Saura y Cala en Turqueta, fueronlos que PCC y servicios de emergencia decidieron evitar, por seguridad.
Segunda etapa en marcha
Este sábado (10h), confiando en que el tiempo lo permita, «y pendientes de cómo estará la zona dels Vergers, hoy (viernes) cerrada», decía Català, sale desde la plaza Constitució de Maó la segunda etapa de la BTT, con arranque y epílogo en este punto. Etapa de 68,90kms, un desnivel acumulado de 921m y dificultad media/alta. Etapa muy variada con carreteras, pistas, caminos y senderos divertidos, de trazado largo pero con componente de desnivel escondido.
De Maó, bajará al puerto para adentrarse ya por antiguos caminos rurales de interior de los términos municipales de Maó y Alaior que nos llevarán hasta la Torre d'en Galmés y de allí entramos en una serie de tramos que combinan pistas rodadoras con tramos de más marcada exigencia técnica que nos llevarán hasta la costa, donde el paso por Calescoves no dejará indiferente a nadie. La ruta permitirá descubrir patrimonio etnológico, con una sorpresa en el puerto de Maó.