El guardameta del Sporting Mahonés estará alrededor de un mes alejado de los terrenos de juego a consecuencia de la rotura fibrilar en el isquiotibial de la pierna izquierda que se produjo el pasado domingo en el partido ante el Alzira.
El jugador maño, que se encuentra de vacaciones en su tierra, explicó ayer a este diario que la lesión se la produjo "en la primera jugada del partido, hice un sprint y noté la típica pedrada en la parte posterior del muslo, por lo que en seguida pedí el cambio". Moso ya sufrió esta misma lesión la pasada temporada, aunque entonces fue en su pierna derecha.
El próximo lunes, a su regreso a la Isla, será sometido a una ecografía en la zona dañada para determinar la longitud de la rotura. "Durante estos días estaré en reposo y tomando los antiinflamatorios que me ha indicado el fisio, y espero volver a jugar cuanto antes, aunque en este tipo de lesiones ya se sabe que suele ser un mes, depende de la extensión".
La plantilla del Sporting Mahonés disfruta de vacaciones durante toda esta semana, hasta el próximo lunes por la tarde.