Omar Sampedro, que la pasada temporada jugó en el CD Teruel, es uno de los jugadores que más gusta a la dirección deportiva del Sporting Mahonés para reforzar la banda derecha aunque en estos momentos las posturas están lejos por las pretensiones económicas del jugador.
El asturiano, de 26 años y 169 centímetros, es un futbolista diestro, que puede actuar como mediapunta, por detrás del delantero, o en la banda, y que tras iniciar el pasado ejercicio en las filas del Pontevedra (Grupo I de Segunda División B), recaló en el mercado de invierno en el cuadro turolense, donde ofreció un gran rendimiento, siendo de lo mejor del equipo en la segunda vuelta.
A pesar de su corta estatura es rápido, abarca mucho campo y tiene buena relación con el gol. Además del supuesto interés del equipo mahonés, cuenta con una oferta de renovación de su actual conjunto, a la que debe contestar en los próximos días -tan sólo restan él y otro jugador de la pasada campaña por pronunciarse-.
Sampedro, formado en las categorías inferiores del Real Oviedo y el Sporting de Gijón, debutó en 2004 con el primer equipo y logró el ascenso a Primera División tres temporadas después, aunque su participación fue testimonial y acabó el curso en el Castellón en Segunda División A. A continuación fichó por la Ponferradina, con la que ascendió a la división de plata, antes de firmar por el Pontevedra.
Además de la banda derecha, también es necesario reforzar la izquierda y el centro del campo, con un organizador, con lo que la plantilla quedaría prácticamente definida, a falta de la llegada otro delantero, en caso de encontrar un jugador que se adecue al perfil y a la economía del club.