El CE Ferreries no fue rival para el invicto Constància que continúa sin perder un solo partido en lo que va de campeonato. El de ayer, lo ganó cuando sólo habían transcurrido cuatro minutos de juego porque en ese corto espacio de tiempo ya había elevado el 2-0 en el marcador del Nou Camp d'Inca.
El dominio fue absoluto del Constància en la primera parte, favorecido por los dos goles tan tempraneros que dejaron el choque sentenciado y sin réplica a un Ferreries inocente y lejos de intentar un imposible. Los azulgrana, a duras penas podían contener los ataques locales y su única llegada con algo de peligro fue a los 23 minutos en una jugada de Toni Pons que abortó Sergio desviando a córner.
El 1-0 había llegado a los 2 minutos de juego cuando Rubio se internaba por la banda derecha y su centro lo remataba Nene, completamente desmarcado. Sólo dos minutos después Pau Siquier ganaba por piernas a su par y se plantaba ante Mingo para fusilarlo. Y el 3-0 llegaba sobre la media hora de juego, de bella factura, tras una doble pared entre Jaime y Nene, que culminaba este último quedándose mano a mano ante MIngo para batirlo con facilidad.
En la segunda parte se mantuvo la tónica de la primera con una supremacía del líder de la Liga. Los de Andújar ya se habían resignado a la inevitable derrota.
Los locales, sin hacer un gran partido, no precisaron apretar el acelerador para mejorar el marcador salvo una acción personal de Esteban que acabó culminando él mismo para desesperación de un impotente, Mingo al cuarto de hora de la segunda parte.
Sobre la media hora, Raúl llegó a la meta del Constància pero no supo acabar la jugada, y poco antes del final Iván tuvo la ocasión más clara de todo el partido para su equipo en un remate franco que mandó fuera. MIngo atajó el resto de los balones que le llegaron y el partido, carente de historia, concluyó sin más.