El fuerte temporal que azotó a la Isla en la noche del pasado miércoles al jueves ha ocasionado desperfectos de diversa consideración en los de campos de fútbol, aunque en principio, ningún club vio afectada su actividad durante la jornada del jueves –la mayoría de los equipos pudieron entrenar– y la jornada del fin de semana se jugará sin problema.
En el campo del Sami, el viento derribó la red protectora situada tras cada portería, mientras que el nuevo Bintaufa, hogar del Sporting de Mahón, advirtió varios desperfectos en las suyas. En cambio, el viejo Municipal de Maó, no padeció a pesar de la intensa fuerza eólica.
El Estadi Maonès, del CD Menorca, vio como una puerta de hierro situada en la entrada trasera al recinto era literalmente arrancada por el viento, al margen de otros daños de menor consideración, mientras que en Son Marçal (Penya Ciutadella) causó avería en las torres de iluminación y en el cuadro eléctrico.
Una estampa que tuvo reflejo en otros enclaves de la Isla –además, algunos pabellones de baloncesto registraron goteras–. Con todo, la jornada deportiva del fin de semana no peligra en la Isla.